Las 21 oficinas del Servicio Andaluz de Empleo en Málaga (SAE), dependiente de la Junta de Andalucía, ya estaban saturadas antes de la pandemia y el Covid-19 le ha dado la puntilla. Miles de despidos, de personas en Expediente de Regulación Temporal de Empleo, empresas pidiendo ayudas, servicios digitalizados... Un revolcón en toda regla que se ha traducido, por ejemplo, en que los funcionarios han realizado 16.000 atenciones al mes en cada oficina, cuatro veces más que en 2019. 

"La tendencia, además, se mantiene porque hay muchas personas que están saliendo ahora de los Ertes, que quieren hacer cursos o hemos tenido una gran afluencia de ciudadanos que se han inscrito al paro en enero", ha explicado la delegada territorial de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Carmen Sánchez, quien, no obstante, ha asegurado que "gracias al trabajo titánico de los empleados estamos al día y no tenemos retrasos en la tramitación o gestión de los expedientes". Hay 391 empleados públicos en el SAE en Málaga y la plantilla no se ha ampliado gracias, apuntan, a que tanto la aplicación móvil como el sistema de citas previa "están funcionando bien". 

Una de las principales labores del SAE es ayudar a los ciudadanos en paro a encontrar un empleo. Según ha detallado Sánchez, en 2021 publicaron 4.366 ofertas de empleo en las que se ofrecían 17.790 puestos. De ellos, se hicieron 15.203 contratos. La mayoría de esta oferta procede de administraciones públicas con cargos de conserje, jardinero, obreros, etcétera. Hay más de 150.000 parados en Málaga por lo que el SAE ha cubierto en torno al 10% de la demanda. Sánchez ha hecho hincapié en que las empresas están demandando perfiles profesionales que no encuentran, principalmente en el ámbito de la logística o la programación. 

Carmen Sánchez, durante la presentación del balance del SAE en Málaga

Ajustar la formación a la demanda real del mercado laboral es una de las asignaturas pendientes de las Administraciones, las universidades y los centros formativos. El SAE va a empezar a utilizar este año una nueva herramienta, llamada perfilado estadístico, cuyo objetivo es afinar más la demanda y la oferta a través de la inteligencia artificial y el Big Data. Con esta plataforma, cada orientador podrá conocer de forma precisa qué tipo de empleos se requieren en cada comarca de Málaga y enfocarse en esos segmentos. Si, por ejemplo, en la Axarquía se requieren personas especializadas en determinados cultivos, se va a canalizar la formación hacia esa materia y se va a avisar a los parados que es en esa área donde van a tener más posibilidades de encontrar un empleo en esa zona. "Esto es el futuro del SAE", ha recalcado la delegada. 

En el SAE no solo se atiende a los parados o a las personas que quieren cambiar de trabajo, sino también a ayuntamientos, empresas, etcétera. El año pasado gestionó la concesión de 251,8 millones de euros a empresas y autónomos de Málaga, mayoritariamente del sector de la hostelería y el comercio. De ese dinero, 195 millones fueron para mejorar la solvencia de 11.642 empresas en esta provincia, mientras que 41 millones se destinaron a mantener el empleo a 5.744 empresas que estaban en Erte y 15 millones para autónomos que estaban en las mismas circunstancias. 

Por otra parte, la Junta ha concedido 17 millones de euros para mantener 3.220 puestos de trabajo en centros especiales de empleo para personas con discapacidad o la puesta en marcha de 114 nuevos puestos. 

"En 2021 nos hemos adaptado forzosamente a las circunstancias del Covid y la digitalización, mejorando las funciones de la aplicación móvil y automatizando todas las ayudas para que les llegara a las empresas de forma ágil", ha subrayado Sánchez.