El fundador de Wikileaks, el australiano Julian Assange, deberá afrontar un caso de acoso en Suecia, después de que la Fiscalía de este país escandinavo decretara el inicio de una investigación preliminar. Assange, quien se encuentra de vacaciones en algún lugar del norte de Suecia en casa de un amigo, tendrá que enfrentarse a un interrogatorio, según decretó la Fiscalía.

La fiscal general sueca, Eva Finné, ordenó archivar una de las dos denuncias por delito sexual presentadas hace cuatro días por dos mujeres distintas, la que hacía referencia a una acusación por violación y que el pasado viernes llevó a una fiscal de guardia a decretar una orden de captura contra él. Esa orden y la sospecha de violación fueron revocadas 24 horas después por Finné, quien alegó que contaba con más información que la juez de guardia, sin especificar, y que asumió a partir de entonces el mando de la investigación. En un comunicado difundido por la Fiscalía sueca, Finné reiteró que no hay fundamento para un caso de violación y concluyó, además, que tampoco hay indicios de ningún otro acto punible.

La legislación sueca define el delito de "ofredande" (acercamiento indebido o acoso) como que alguien de forma clara importune o, con otro comportamiento desconsiderado, moleste a una persona, y está penado con un máximo de un año de cárcel, aunque lo normal es que se castigue con una multa. El abogado de las dos denunciantes, Claes Borgström, se mostró muy crítico con la Fiscalía y anunció la presentación de un recurso contra la decisión de la fiscal, mientras que el defensor de Assange, Leif Silbersky, habló de "escándalo" por mantener los cargos contra su cliente y atacó a Maria Häljebo Kjellstrand, la fiscal de guardia que decidió emitir la orden.

El proceder de la Fiscalía en el caso ha atraído la atención internacional y ha desencadenado duras críticas de juristas suecos por la falta de explicaciones sobre los motivos para retirar en un día una orden de captura por supuesta violación. La Organización por el Estado de Derecho ha presentado una denuncia ante el Defensor del Pueblo en el área judicial contra la fiscal de guardia.

Los hechos denunciados se produjeron supuestamente hace más de una semana, coincidiendo con la gira de conferencias que Assange realizaba por Suecia, invitado entre otros por el Partido Pirata sueco. Esta organización a favor del libre intercambio de archivos en la Red anunció que servirá de soporte para los servidores de Wikileaks, compromiso que mantendrá pese a la polémica.

Una de las denunciantes declaró hace unos días bajo anonimato al diario sueco Aftonbladet que había sido contactada por otra mujer, a la que no conocía y quien dijo que había sido violada por Assange, y que, tras contrastar sus historias, decidieron presentar sendas denuncias. En ambos casos se trató de episodios de sexo consentido que se produjeron en días distintos y que luego acabaron en abuso con "un hombre con una visión equivocada de las mujeres y problemas para aceptar un no", dijo la denunciante.

Assange ha negado las acusaciones y ha insinuado que puede tratarse de un montaje para perjudicar a Wikileaks, el portal dedicado a difundir informes confidenciales y que en las últimas semanas ha acaparado gran atención por publicar 70.000 documentos secretos del Ejército de EEUU sobre la guerra de Afganistán. Wikileaks tenía previsto difundir otros 15.000 documentos confidenciales sobre este conflicto bélico en los próximos días.