Análisis

nacho artacho

Charlestón

Repasa el cuplé que Prado y Costa han escrito para el estreno. No le convence

Comparado con los teatros de la Argentina, piensa Lola, este Vital Aza no pasa de corralón de comedias. Las paredes de madera y el revestimiento de toldos anuncian incendios y voladuras evitables. No merece la plazoleta tierna que se abre frente a la fachada principal. La vista franca del puerto permite a los parroquianos fantasear con el destino de los buques que zarpan. La Montes cree distinguir los pañuelos en cubierta, los sombreros que caen por sobre las barandillas. Para cuando quiere darse cuenta, la tarde se le ha ido en barcos y cavilaciones, y apenas queda luz con que seguir la lectura. Repasa el cuplé que Prado y Costa han escrito para el estreno. No le convence. Se ha malacostumbrado al público bullanguero y facilón de la zarzuela. "Lo harás bien, chati. Tú sólo tienes que menearte un poco, enseñar pechuga y llorar todo lo que puedas. Estos desgraciaos no piden más". El olfato del empresario no falla esta vez: la copla del recluta moribundo -que a ratos deriva casi en charlestón- pone en pie al patio de butacas. Antes de bajarse de las tablas, Lolita ya ha firmado tres contratos. El primero de ellos la va a llevar a Marruecos en menos de una semana.

El protectorado español del norte de África es un avispero. Las cabilas de Abd-el-Krim acaban de pasar a cuchillo a las tropas de ocupación y se disponen a proclamar la República del Rif. De camino, han inventado la guerra de guerrillas moderna. Vestida de enfermera, Merceditas Fernández -Lola Montes para el siglo y la farándula- se presenta ante los supervivientes e interpreta el dramón del legionario caído. En primera fila, un teniente coronel entra en éxtasis imaginando el modo en que convertirá aquel charlestón en un himno que levante la moral del regimiento. A esas alturas, todavía no sabe que los travestis del cabaré se le han adelantado y ya empiezan a incorporar El novio de la muerte a su repertorio.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios