EL sistema de Parques y Jardines para limpiar algunas plazas es algo ruidoso. Consiste en un dispositivo que mediante aire desplaza la basura a modo de barrido. Es eficaz y permite limpiar un parque de pipas y otras basuras en muy poco tiempo. El problema es que el método en cuestión genera ruido. Ahora que los niños están de vacaciones y que muchas familias cambian su rutina, acostándose más tarde por las noches aprovechando el fresco y permitiéndose luego prolongar el sueño hasta bien entrada la mañana, resultan molestos los sonidos que emite este sistema de limpieza. Cuando uno de los aspectos más apreciados por los vecinos es la tranquilidad y los entornos alejados de las estridencias, no parece lo más adecuado que los responsables municipales de la limpieza contribuyan a la contaminación acústica; ciertamente no excesiva, pero contaminación acústica al fin. El método se emplea desde hace varios años en la ciudad de Málaga y no tiene visos de modificarse. Pero debería reconsiderarse en aras de avanzar hacia entornos con menos ruidos que es uno de los aspectos de las ciudades que más aprecian quienes viven en ellas.

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