Málaga C.F.

Mimos y remedios para Ramón Enríquez

Ramón, minutos antes de lesionarse ante el Mérida

Ramón, minutos antes de lesionarse ante el Mérida / Carlos Guerrero

El nombre de Ramón Enríquez ha copado la actualidad semanal del Málaga CF. Se pierde al de Órgiva hasta final de temporada, otro condicionante adverso con el que se tendrá que convivir en estas semanas, además con un Ramón que iba adquiriendo peso en la columna vertebral blanquiazul y podía ser importante. Sergio Pellicer, durante la previa del San Fernando-Málaga CF, comentaba la pérdida del canterano, y eso que el técnico blanquiazul tuvo toda la paciencia del mundo para evitar la recaída del centrocampista. "Ya lo dije en el pospartido el otro día. La peor noticia, además de empatar, era lo de Ramón. Ya está. Darle el máximo apoyo y ánimo, que tenga una pronta recuperación. El club está tocando los mecanismos para su recuperación. Es algo muscular, lo mismo que le pasó hace unos meses. En los plazos, no nos va a ayudar en este tramo. Sabemos de la importancia de Ramón. Un jugador de superior categoría, que ve el fútbol de una manera diferente. Lo mas importante es lo personal más que en lo deportivo, que mentalmente esté bien ya se lo dicho a él. Tiene 23 años, que sigue siendo un chaval", esperanzado Pellicer con ver a un Ramón pleno en breve.

¿Qué tiene Ramón?

"Las pruebas médicas confirman que Ramón sufre una lesión miotendinosa en el recto anterior del cuádriceps derecho". Era el parte oficial del Málaga CF el pasado miércoles acerca de la dolencia de Ramón Enríquez, que se pierde lo que queda de temporada. El centrocampista se retiró por unas molestias del partido disputado el pasado domingo en La Rosaleda contra el Mérida. Las pruebas a las que se ha sometido confirman una nueva lesión que ha sentado como un jarro de agua fría en el club.

Una noticia demoledora para el Málaga y, por supuesto, para el propio futbolista. Ramón, a quien volver a los terrenos de juego le ha costado casi un año, vuelve a caer tras un regreso esperanzador. Le había ido metiendo poco a poco Pellicer, concediéndole minutos en los tramos finales de algunos de los recientes partidos. Ante el Mérida regresó a una alineación titular y aguantó apenas 20 minutos en el verde.

No notó que se hubiese roto, pero quiso ser precavido porque por sus antecedentes sabía que una cosa podía llevar a algo más importante. Finalmente sí que estaba lesionado. Ramón, uno de los capitanes, acaba contrato el próximo 30 de junio y tanto el Málaga como él tendrán que tomar una decisión sobre su futuro.

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