Milán se convierte esta semana en el epicentro del baloncesto, play off de la NBA aparte. Allí se dan cita Barcelona, Real Madrid, Maccabi y CSKA, pero también representantes de la mayoría de los clubes que han tomado parte de la competición, junto a los agentes más poderosos de la canasta continental y otras personas influyentes del mundillo, como scouts de la NBA.

Habitualmente, el Unicaja siempre está presente en estos eventos. Es momento de hacer pasillos y testar el mercado. Si la Copa del Rey es el pistoletazo de salida para oficioso para los refuerzos de la siguiente temporada, tres meses después las necesidades o carencias detectadas son más evidentes. Y en la Final Four se encauzan las negociaciones. Pero el Unicaja ha decidido esta vez no estar representado en Milán. No viajarán ni el presidente ni ningún miembro de la dirección deportiva. La razón es económica. La semana pasada, no obstante, no hubo problema en sufragar un taxi de Valladolid a Marín para que Domas Sabonis jugara con el equipo junior que salió por más 600 euros.