La semana pasada el barítono malagueño Carlos Álvarez, que participó en el concierto de presentación del nuevo director de la OFM en el Teatro Cervantes, ofreció un curso de canto en el Conservatorio Superior de Música de Málaga. Los alumnos del centro vieron la oportunidad de acercarse al cantante e implicarlo en su lucha y le pidieron que grabara un vídeo reivindicativo que colgaron en Youtube el viernes. En este mensaje, Álvarez reclama que "la enseñanza musical sea contemplada como universitaria".

"Desde el Conservatorio Superior de Música de Málaga hago un llamamiento a quien corresponda para que contemple la necesidad, casi obligatoriedad a estas alturas en las que nos encontramos, de que la enseñanza musical sea contemplada como universitaria, con sus derechos y con sus obligaciones, y con la posibilidad de que el grado que se oferta desde la universidad sea finalmente equiparable a la titulación que el Conservatorio Superior otorga a sus estudiantes", pide Álvarez en el citado vídeo.

Además, el barítono considera de justicia "la posibilidad de que aquellos que han logrado superar un tiempo enorme de preparación en un conservatorio y que finalmente cuando terminan sus estudios superiores tienen la posibilidad de obtener una titulación, puedan ser homologados en derechos y obligaciones a aquellos que tienen su Grado desde la faceta universitaria". Y quiso hacer suya la petición y la "queja" tanto de alumnos como profesores.

David Wadie, uno de los alumnos del centro y miembro de la plataforma Ademas, que incluye también al Conservatorio Superior de Danza y la Escuela Superior de Arte Dramático, apuntó ayer que la buena oportunidad que supone "que una voz de reconocimiento internacional se declare a favor de la adscripción del Conservatorio a la Universidad de Málaga". Según Wadie, el barítono se adhirió rápidamente a la reivindicación propuesta por los alumnos, que continúan con sus reivindicaciones.

La pasada semana el Conservatorio de Danza sacó sus clases a la calle. En la plaza de Santo Domingo impartieron asignaturas como Flamenco, Interpretación o Diseño y Elaboración de Proyectos Educativos con el objetivo de mostrar a la ciudadanía su reclamación. Desde hace cuatro años las artes escénicas adaptaron sus estudios al espacio europeo. Sin embargo, a tres meses de que salga la primera promoción del Plan Bolonia, su titulación no será de grado, ya que ésta tan sólo la puede expedir una universidad. En la última reunión con la UMA, el pasado 4 de marzo, el gabinete jurídico les comunicó que primero se tenía que crear una licenciatura de artes escénicas para que los conservatorios como centros se pudieran adscribir a ella. El futuro cercano para estas enseñanzas aún se presenta complicado.