Málaga

La rocambolesca odisea del Astoria

  • Urbanismo da licencia a Baensa para construir, pero asume que no lo hará · En duda el pago de los gastos reclamados por la firma

La situación en la que se desenvuelve la operación de compra de los antiguos cines Astoria y Victoria por parte del Ayuntamiento es, cada día que pasa, más inverosímil. Casi un año lleva el equipo de gobierno del PP negociando con la propietaria, Baensa, su enajenación y no acaba de cerrar los últimos detalles. El último episodio cuanto menos rocambolesco se dio hace una semana, cuando la Gerencia de Urbanismo concedió licencia de obras a la promotora para ejecutar el proyecto residencial contemplado para la finca, un permiso que se aporta pocos meses después de que se le negase por no cumplir las exigencias marcadas.

Lo curioso del caso es que el departamento municipal autoriza a Baensa la construcción de pisos sobre unos inmuebles en los que el Consistorio pretende levantar un gran equipamiento cultural. Aunque, del dicho al hecho sigue habiendo un trecho. Porque una cosa es que Baensa tenga concedido, que no expedido, el permiso y otra que la promotora vaya a actuar. Así al menos lo explicaron a este periódico fuentes de Urbanismo, que confirmaron la concesión de la autorización, extremo también admitido desde la empresa.

¿Por qué si antes de le denegó? "Es verdad, se le denegó pero recurrieron la decisión y hemos aceptado lo que planteaban", señalaron las fuentes consultadas, que admitieron que "teóricamente" la firma podría empezar las obras. Sólo en teoría. "No lo van a hacer", dijeron de manera confiada.

Una seguridad basada en las conversaciones que desde hace meses mantienen las dos partes y la existencia, al parecer, de un principio de acuerdo que hace prever que en no muchas semanas culmine la compra de los edificios. Desde Baensa apuntaron que la concesión de la licencia ha de permitirle reclamar el abono de los gastos que viene arrastrando desde la adquisición de la parcela, incluyendo todos los proyectos realizados, y que pueden elevarse a unos 7 millones de euros.

La duda es cuánto percibirá Baensa a cambio del Astoria y Victoria. Desde Urbanismo indicaron que la valoración del suelo se cifra en unos 17 millones, a pagar mediante 10 millones en metálico (ya acordados hace meses en Junta de Gobierno Local) y con terrenos. Del paquete inicial de parcelas se han caído las localizadas en Colinas del Limonar, según dijo el concejal de Urbanismo, Manuel Díaz Guirado, por el propio desinterés de la empresa, así como el terreno municipal localizado en la Avenida José María Ingeniero Garnica. Los aprovechamientos que se mantienen son los de Hacienda Paredes (algo más de cuatro parcelas) y cuatro suelos para VPO en Morillas y Parque Norte.

A todo ello, y aquí es donde parece estar el último interrogante, hay que agregar los gastos acumulados. Sobre ello, las fuentes de Urbanismo pusieron en duda que esa cantidad se vaya a abonar de inmediato. "En su momento, pero ahora mismo no porque no hay ninguna razón", expusieron. Un elemento de la negociación en la que, según fuentes próximas a la empresa, parece existir consenso. "Lo que nos dicen es que se asumirá ese pago cuando la disponibilidad presupuestaria lo permita", apuntaron, aunque no supieron precisar a cuánto ascenderá esa cantidad dado que mientras Baensa calcula los mencionados gastos en unos 7 millones, Urbanismo no lo tiene tan claro.

Este es el escenario en el que se mueven los últimos hilos de la operación de compra del Astoria. Una odisea rocambolesca que difícilmente pudo imaginar el alcalde, Francisco de la Torre, cuando a principios de diciembre de 2009 se atrevió a anunciar la adquisición de tan señalada parcela de la Plaza de la Merced.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios