Hace 28 años se puso en marcha en Fuengirola una asociación que pretendía hacer más fácil la vida de las familias que tuvieran algún miembro afectado por una discapacidad. Se trata de Fuensocial, una asociación pionera en la provincia que se encarga de prestar ayuda y todo tipo de servicios a aquellos que más lo necesitan.

Mercedes Campoy, su presidenta, recuerda que en 1982 un grupo de padres decidió crear la entidad para ofrecer servicios a los discapacitados de Fuengirola. Hasta ese momento las familias tenían que trasladar a los afectados a Málaga capital en un autobús, que desde Estepona recogía a los usuarios de todas las localidades costeras. Para hacer frente a esta carencia se creó Fuensocial, poco a poco, con mucho trabajo y sobre todo ganas de ayudas. "Todo empezó en un piso del Ayuntamiento de Fuengirola, en el cual ofrecíamos estimulación temprana. Ya hemos pasado por cuatro locales distintos, porque nuestras necesidades siguen creciendo", explica Mercedes.

Desde entonces Fuensocial ha aumentado exponencialmente su volumen de trabajo, hasta el punto de que ofrece todo tipo de terapias y actividades para los usuarios con sólo unos meses de vida hasta aquellos que ya son adultos. Entre esta cartera de servicios destaca el Centro de Desarrollo Infantil y Atención Temprana, un servicio que atiende de forma global a niños de cero a seis años, en el que se ofrecen los servicios de logopedia, fisioterapia, atención social atención psicológica, entre otros. A ello se suman la unidad de Rehabilitación Logopédica, que cuenta con un convenio desde 2002 al Hospital Costa del Sol; un centro ocupacional, donde los usuarios pueden realizar todo tipo de trabajos como cerámica, encuadernación, restauración o jabón reciclado, entre otros; una residencia para adultos, con un servicio asistencial integrado del que disfrutan un 23 discapacitados; una unidad de estancia diurna con capacidad para 12 personas; y también una unidad de atención psicológica en la que se ofrece ayuda a personas con problemas escolares, con trastornos alimentarios, depresión o ansiedad, por ejemplo. Estas son sólo algunas pinceladas de la múltiple oferta asistencial de la que dispone, ya que si por algo se caracteriza Fuensocial es por dar la mayor cobertura posible a los discapacitados en todo tipo de actividades posibles.

"En Torremolinos también tenemos un local en el que se ofrecen servicios de atención temprana para niños. Empezamos hace casi dos años con nueve niños y ahora ya contamos con sesenta. Por ello necesitaremos un sitio más grande para atender a las familias que lo requieran", explica Mercedes, que detalla que los casos que se atienden desde la entidad siempre son derivados desde Servicios Sociales o por Salud.

En estos momentos la entidad fuengiroleña cuenta con dos sedes en el municipio, muy cercanas una de la otra. En la más antigua se encuentran los talleres, mientras que en el nuevo edificio, cuyo suelo fue cedido por el Ayuntamiento, se ofertan los servicios de atención temprana, además de contar con salas de reuniones y conferencias, por ejemplo. Una sede mucho más grande, por la que los miembros de Fuensocial han luchado mucho tiempo, ya que durante bastante tiempo estuvieron solicitando y buscando líneas de financiación para hacer posible su construcción, gracias a lo cual recibieron la ayuda de diferentes entidades, entre las que se encuentra la Fundación ONCE.

"Nos quedan por poner unos 500 metros de solería en la segunda planta", explica Mercedes con una sonrisa, mientras piensa en nuevos proyectos de futuro, como es el caso de una nueva unidad de respiro familiar para niños de hasta 16 años.

Por todo ello, por su sueño, solicita la colaboración de todos para seguir luchando día a día por los niños y adultos a los que Fuensocial ofrece su ayuda de forma desinteresada.

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