Cultura

Un verano Canela

  • Esta semana llega a Málaga la octava edición del Canela Party Conciertos, disfraces y mucho confeti en la fiesta más irreverente del verano

La Real Academia Española define pitote como "alboroto, barullo a causa de una pendencia". Así denominan los organizadores a las fiestas de jolgorio, albedrío, algún que otro exceso y mucho, mucho confeti del Canela Party.

Detrás de este proyecto se encuentra Culoactivo Canela formado por Álvaro, José Manuel , Alberto, Sergio, Juan Manuel, Antonio y Juan Antonio; un grupo de jóvenes emprendedores en materia de festivales y espectáculos. La inminente edición del Canela Party 2014 se celebrará a partir de este jueves y hasta sábado en tres enclaves distintos: la sala Velvet, la sala Eventual y el Muelle Uno. Álvaro, uno de los organizadores, nos explica el concepto de su peculiar verbena que reunirá más de mil personas este fin de semana.

"Con los pitotes ya queríamos marcar una intencionalidad de lo que iban a ser nuestras fiestas desde el principio. Pero la idea era institucionalizar un poco lo que en realidad era un grupo de amigos irreverentes." Todos eran incondicionales de la música, la fiesta y los conciertos, pero necesitaban convertirlo en algo serio. No solo no lo consiguieron, sino que convirtieron la fiesta en el evento más descarado del verano. Por aquel entonces el grupo organizaba conciertos en los que ya se desarrollaba el germen que terminaría convirtiéndose en el Canela Party. "Teníamos un grupo llamado The Skirmish Society con los que tocábamos mucha tralla y mucho hardcore. Pero en cambio también nos disfrazábamos, lanzábamos confeti y regalábamos caramelos. Te puedes imaginar la escena [risas]", recuerda Álvaro. Los primeros pasos del festival comenzaron cuando el propio grupo decidió en 2007 invitar a otras bandas a que hicieran lo mismo. En algunos casos, la disparatada idea no convencía del todo a los managers de estos grupos, que terminaban por no avisar a sus artistas. Pero en la mayoría de los casos, los grupos invitados estaban encantados con el arquetipo Canela. "Lo que suele ocurrir es que al final es la banda quien viene a ver al público, y no el público a la banda. Conocemos muchísimos grupos nacionales que quieren tocar en Canela, y nos encanta". No es para menos. La importancia del ambiente que se respira en cada edición, convierte la actuación en algo meramente anecdótico. Al cabo, ameniza 'la mejor fiesta del mundo' como la califican sin tapujos sus organizadores.

"Invitamos a la gente a que se disfrace y participe en nuestro concurso. De hecho este año en el Muelle Uno, pondremos un taller para que los niños fabriquen sus propios trajes con material reciclado, y que luego los destrocen por la noche". Pero, ¿qué tiene que tener un Disfraz Canela? "Verás, tenemos dos ligas:", explica ,"una es la de 'me disfrazo y cumplo' y otra es la del 'voy a ganar', en la que animamos a la gente a que desarrolle su creatividad". Y a lo largo de ocho ediciones, se han encontrado muchas sorpresas, como por ejemplo, la inventiva de unas chicas disfrazadas de edificios (con luces de led) mientras que, una de ellas, lo hacía de Godzilla. "Hay gente que se disfraza de un hito que sucede durante el año. En 2010, coincidiendo con el mundial de España-Holanda, me disfrace de Xavi Alonso recibiendo una patada en el pecho. Buscamos esos disfraces impensables."

Adultos, niños disfrazados... ¿y mascotas?. "¡Pero a quién no le gusta ver un perro disfrazado!", se justifica el organizador. "La idea era ampliar el festival. Con el paso de los años, nuestros amigos empezaron a tener críos y tuvimos esa idea. Y bueno, siendo al aire libre ¿por qué no incluir mascotas?".

Siendo un colectivo pequeño, financiar un festival que cada edición crece exponencialmente, no es tarea fácil. "Todos tenemos un trabajo aparte del festival: en Culoactivo hay un empresario, un profesor, un informático... todos los meses cada miembro pone una pequeña aportación para que nunca haya imprevistos. Por ejemplo, si hay ediciones en las que se saca dinero, lo guardamos en esa cuenta común. En cambio si tenemos una edición en la que se pierde, tenemos un 'colchón' para que el festival siga funcionando". En cualquier caso, prefieren no dar una cifra exacta sobre el presupuesto del festival. "Se aleja mucho de lo que cuesta el un 101 Sun Festival, por ejemplo" señala.

La presente edición cuenta con varias novedades, como por ejemplo, la inclusión de bandas internacionales, la instalación de autobuses gratuitos desde el centro con dirección a la fiesta de la sala Eventual (en el polígono San Luis), una exposición fotográfica en El último mono y una escuela de baile con canciones de Airbag (el propio vocalista, Alfonso Díaz, presentará la muestra), Joan Colomo o The Beach Boys.

Termina la edición del Canela Party, ¿y ahora qué?. "En agosto nos vamos de vacaciones, pero en septiembre ya estamos maquinando. Para traer artistas internacionales a buen precio, tenemos que hacerlo con mucha antelación. En esa linea, en cada edición el festival aprende de sus errores y crece, probablemente no en cantidad (tampoco pretenden masificar sus pitotes), pero sí en calidad. Habrá Canela por muchos años siempre y cuando el proyecto mantenga su atrevida esencia.

"Ahora mismo estamos estresadísimos, en esa fase en la que pensamos que 'va a ser la última'. A este paso parece que el Canela nos va a quitar la salud o nuestra novia [risas]. Pero no podemos dejarlo, montar esta fiesta es nuestra adicción." ¿Para el futuro?, ya tienen en la recamara un par de bandas a la espera de tocar en próximas ediciones. También les gustaría celebrar el día grande al aire libre, y muy encarecidamente, llevan años deseando traer un castillo hinchable al espectáculo.

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