La posible presencia de cebos envenenados en las proximidades de la urbanización Arenal, en ronda, ha desatado la alarma entre los propietarios de mascotas, que han visto cómo varios perros han tenido que ser atendidos por la presunta ingesta de alguna de estas trampas mortales. El último de los casos ha sido el de Pluto, un can que parece haber salvado la vida por la rápida reacción de su dueño, que mientras jugaba con él se percató de que había vomitado en dos ocasiones y no podían mantenerse en pie, por lo que decidió acudir rápidamente a su veterinario. El tratamiento pudo hacerle efecto a tiempo y evitar que terminarse muriendo. Eso sí, el veneno parece haber dejado muy tocado el hígado del animal.

Poco antes de que evidenciase los primeros síntomas de envenenamiento, el perro había estado paseando por los alrededores de un parque infantil, donde jugó entre la hierba y la masticó, aunque todo hace indicar que en realidad había ingerido uno de estos trozos de carne rociado con veneno, que son cebos mortales en la mayoría de los casos.

El caso de Pluto no es el único. Son varios los animales que han sido tratados en distintos centros veterinarios procedentes de la misma zona y todos con síntomas propios de haberse envenenado. Además, los agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía también habrían localizado un perro muerto en las proximidades del paraje conocido como la Parrilla, situado a escasos metros de la urbanización Arenal.

Todo hace indicar que su muerte ha sido causada por envenenamiento, aunque se está pendiente del resultado de las muestras enviadas a los laboratorios especializados. Tanto este paraje como la propia urbanización se encuentran situados junto a la entrada a Ronda por el barrio de San Francisco.

Tras tener conocimiento de los hechos, la Patrulla Verde del Ayuntamiento de Ronda ha iniciado una investigación para tratar de esclarecer lo ocurrido y no se descarta realizar un nuevo rastreo con perros especializados en la localización de cebos envenenados. Mientras tanto, los dueños de perros y gatos siguen muy preocupados por la situación que se está viviendo en la zona, ya que también se habrían producido ataques con pistolas de aire comprimido en varios puntos. Así lo manifestaron miembros de una protectora de animales que han atendido a algunos de las mascotas alcanzadas por disparos realizados con este tipo de armas.

Además, existe cierta preocupación por la supuesta zona en la que habrían comido estos cebos algunos de los perros, al estar situada junto a un camino que conduce hacia el parque infantil de la urbanización.