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Dos años de vuelta al mundo en kayak

  • El aventurero Ricky D. Smith llega a Málaga camino de África

  • La pérdida de visión le dio fuerzas

El estadounidense Ricky D. Smith, el segundo por la derecha, en el Ayuntamiento, ayer.

El estadounidense Ricky D. Smith, el segundo por la derecha, en el Ayuntamiento, ayer. / M. g.

El estadounidense Ricky D. Smith, que comenzó su aventura marítima hace más de dos años en Alemania, se encuentra en Málaga antes de continuar hacia la costa africana. Un problema de pérdida de visión fue el impulso definitivo para que Smith decidiera echarse a la mar con el fin de "ver las cosas bonitas del mundo". Un contratiempo que para cualquier hubiera supuesto dar un paso atrás supuso todo lo contrario para este norteamericano de 59 años que está embarcado en "una aventura sin fecha límite" en la que sólo quiere "disfrutar del deporte y de la vida". Una casualidad llevó a Smith a llegar a la cuidad: cuando navegaba cerca de la costa malagueña notó cómo el casco de su kayak tenía una fisura por la que entraba agua en la embarcación.

El navegante llegó a tierra el pasado domingo con una grieta en el casco de su casa flotante y la vela rasgada después de años de desgaste en alta mar. Sergio Parera, presidente del Club de Playa Térmiko, fue el primero en divisar la embarcación de Smith desde tierra. En un primer momento, Parera pensó que era un amigo que posee una embarcación de similares características, pero no esperaba encontrarse con un Willy Fog marino.

Parera, al conocer la historia de primera mano, sólo pudo definirla de "increíble". Una aventura en solitario "digna de valorar por su esfuerzo", demostrando que "no hace falta mucho para vivir", en palabras de Parera. El navegante pudo reparar su embarcación gracias a las gestiones realizadas por el Club de Playa Térmiko.

Smith navega en su trimarán -una embarcación similar a un kayak pero que cuenta con una vela para aprovechar el viento para avanzar- sin más patrocinadores ni apoyos que no sean sus propios medios, lo que le ha llevado a depender en muchos casos de invitaciones de personas que le han permitido cubrir necesidades básicas como la de ducharse, comer o descansar.

La ruta marítima comenzó cruzando el océano Atlántico hasta llegar a Europa, donde el aventurero visitó países como Alemania, Holanda, Reino Unido, Bélgica o Francia antes de llegar a las costas españolas, todo ello con una lesión en el nervio óptico entre el ojo y el cerebro, lo que le ha provocado un empeoramiento en la vista, siendo un daño degenerativo que podría dejarle ciego.

Smith quiso dar las gracias a Málaga por su acogida. El estadounidense afirmó que ha tenido "mucha suerte a pesar de que no era una parada prevista", y es que ha podido "reparar los problemas de la embarcación" de forma rápida para continuar con su camino. Una vez que deje Málaga, su primer destino será el Algarve portugués, zona que tiene especial interés en conocer. Una vez en tierras lusas girará hacia el sur, para navegar por las costas africanas y visitar Marruecos, Senegal y Gambia antes de volver a poner rumbo a territorio español: Canarias.

La incertidumbre de Smith llega una vez que se encuentre en las islas ya que este aventurero aún no tiene cerrada su ruta. La única idea fijo que tiene Smith es que pondrá destino al continente americano, aunque el abanico de opciones amplio. Sopesa si fijar un rumbo fijo hacia Venezuela y Trinidad y Tobago o si hacer una primera escala en el archipiélago africano de Cabo Verde para posteriormente atravesar el Atlántico para llegar a Brasil.

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