Cada victoria vale para subir una unidad más al casillero de triunfos en la clasificación, pero no todas pesan lo mismo. La que consiguió ayer el Unicaja es más, mucho más que una corriente. En este arranque de temporada el equipo de Joan Plaza ha mandado varias señales de autoridad, pero dos relucen más, conquistar Vitoria y Valencia, los rivales naturales tras los transatlánticos futboleros. En un año que es bisagra para el futuro inmediato por el asunto de las licencias de Euroliga tener a tres y cuatro victorias a Valencia y Baskonia, habiendo ganado en sus pistas, es sintomático de lo que este Unicaja transmite y derrama. Ayer liquidó con una solvencia como hacía años que no se le veía al equipo taronja (64-75). El hueco en juego, actitud y concentración fue mayor que el del marcador entre los dos equipos. Un gran Unicaja que dejó ardiendo a un empequeñecido Valencia que no se reconoce, que está a años luz del que asombrara la temporada pasada. El Unicaja crece y ellos menguan. Grandes señales.

Varios nombres propios en un partido en el que el equipo malagueño dominó con puño de acero desde el segundo cuarto. Tras un buen arranque (5-12), Dubljevic hizo pupa para igualar el partido (22-19 al final del primer cuarto). El montenengrino fue en ese momento el único factor incontrolable a lo largo de los 40 minutos. Una vez desactivado el Unicaja se sintió dueño y señor, desprendiendo el aroma y la suficiencia bien entendida del equipo grande. Uno de los caballos de batalla de los que habitualmente se ha hablado esta temporada era la incógnita de los ala-pívots estadounidenses. Pues bien, en un escenario habitualmente hostil, con rivales parejos, sobre todo Will Thomas y Caleb Green ofrecieron actuaciones para pensar que sí, que pueden contender con armas similares ante los mejores. Es uno de los sectores por donde más puede crecer el Unicaja, en el progresivo rodaje de Thomas y Green, esa extraña pareja que ayer se combinó para anotar 27 puntos y nueve rebotes.

Compartieron pista en una variante que Plaza emplea con asiduidad cuando Golubovic no está fino. Como simultanear a Suárez y Kuzminskas. O Granger y Markovic. Hay tantas variantes en el arsenal que va fermentando el técnico catalán que hay espacio aún para un crecimiento exponencial de varias piezas, casos de Vasileiadis o Golubovic, que aún están en ese proceso de digestión de conocer qué quiere Plaza de ellos en todo momento. Y ahí, cada uno a su manera, hay dinamita.

El Unicaja le dio las primeras vueltas en la sartén al Valencia en el segundo cuarto, cuando cambió el ritmo del encuentro los primeros fogonazos de un enorme Kuzminskas, definitivamente con la melena suelta. Si Thomas es una especie de yunque que rara vez falla, el lituano es el martillo. De seda por su excelsa calidad, pero dañino para los rivales. Tiene el lituano ese aura de jugador especial, pero ahora lo está ratificando. Y al descanso, tras una trabajada canasta de Thomas, se dominaba (33-39).

El Unicaja consiguió desactivar los 2x2 en la parte alta del ataque que por un momento hicieron daño. Y salió con un mazo (2-10 de parcial) tras pasar por los vestuarios. Con Fran Vázquez de indiscutible amo en el candado defensivo tejido por Plaza, con Granger (nueve asistencias) más base que percutor ayer. Con muchas alternativas. Y en un parpadeo, 15 puntos de renta (36-51). Los impulsos da casta de Pau Ribas y Rafa Martínez no bastaban para bajar la renta cajista de los10 puntos. Y ahí emergió definitivamente Kuzminskas para destrozar el partido (55-73). El instinto asesino que se le suele reprochar que le falta lo poseyó ayer. Su catálogo de fundamentos se unió a su puntería exterior. No importó que Toolson fuera intrascendente porque cometió tres faltas en el primer tiempo. El Unicaja tiene suficientes polvorines para dañar las líneas enemigas. También para dejar Valencia ardiendo y con Perasovic oliendo a chamusquina. Incluso pudo hacer más sangre el equipo malagueño, al que no se le divisa el tope.

Ficha Técnica:

64 - Valencia Basket (22+11+15+16): Vives (7), Rafa Martínez (11), Sato (-), Lucic (6), Lishchuk (5) -cinco titular- Ribas (7), Nedovic (10), Dubljevic (11), Loncar (2), Aguilar (-) y Harangody (5).

75 - Unicaja (19+20+21+15): Granger (4), Toolson (6) Kuzminskas (18), Green (10), Vázquez (6) -cinco titular- Markovic (-), Vasileiadis (4), Thomas (17), Suárez (2), Stefanson (4) y Golubovic (4).

Árbitros: Conde, Cortés y Fernández Sánchez. Sin eliminados.

Incidencias: partido correspondiente a la octava jornada de la fase regular de la Liga Endesa disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 8300 espectadores. Antes del inicio del encuentro, Velimir Perasovic, técnico del Valencia Basket recibió el trofeo como mejor entrenador de la pasada temporada para la Asociación española de entrenadores. Además, se realizó un acto de apoyo a la campaña 'Hay salida' contra la violencia machista.