Estepona

Estepona activa el servicio de salvamento y de baños asistidos en las playas

  • La costa esteponera contará con estas prestaciones hasta el 15 de septiembre

La presentación del servicio de salvamento y socorrismo de Estepona.

La presentación del servicio de salvamento y socorrismo de Estepona. / M. H. (Estepona)

El Ayuntamiento de Estepona ha puesto en funcionamiento el servicio de salvamento y socorrismo en las playas de la ciudad, que se prestará de forma continuada hasta el próximo 15 de septiembre, así como se implementarán baños asistidos en La Rada y El Cristo, según ha informado este miércoles la concejala del ramo, Susana Aragón.

La responsable municipal ha explicado que La Rada contará con 8 socorristas acuáticos y 3 terrestres, El Cristo con 3 y 1, El Padrón con 2 y 1; Arroyo Vaquero 2 con socorristas acuáticos y 1 terrestre y El Saladillo con 2 socorristas acuático y 1 terrestre.

Además, el servicio de socorrismo tiene a su disposición una ambulancia con un técnico de transporte sanitario, un socorrista terrestre y un enfermero, así como una embarcación de rescate con patrón y un socorrista acuático.

La empresa concesionaria del servicio de vigilancia se encarga también de dotar a los módulos de playa de material sanitario como botiquines, desfibriladores, collarines cervicales y todos los utensilios necesarios para un puesto de estas características.

Asimismo, la responsable municipal ha indicado que también esta temporada se ofrecerá a los usuarios de las playas un servicio diario de baños asistidos para personas con movilidad reducida. Esta actividad gratuita también está disponible hasta el 15 de septiembre, desde las 12.00 hasta las 20.00 horas.

Los usuarios dispondrán de este servicio de baños asistidos en las playas de La Rada (módulo de Monterroso) y El Cristo. En ambos enclaves se contará con técnicos sociosanitarios y material adaptado que incluye sillas anfibias, tumbonas adaptadas, andadores para la arena y juegos de muletas anfibias.

El Consistorio también ha instalado pasarelas con un ancho especial en los accesos públicos a las playas, lo que permite el tránsito de sillas de ruedas. Además, se han dispuesto áreas de sombre destinadas a las personas que tienen dificultades de movilidad.

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