No habrá más retrasos y entre mañana y el viernes la empresa mixta de limpieza Limasa hará efectivo el registro del convenio colectivo ante la Junta de Andalucía para su publicación definitiva, que estará en vigor hasta 2015 y que ha sido motivo de conflicto en el seno de la entidad en los últimos dos años. Lo hará de forma unilateral, sin la firma de los representantes del comité de empresa y con el acuerdo firmado el pasado 23 de diciembre entre las partes para poner fin a la huelga de basura que los trabajadores habían iniciado unos días antes.

Después de que los socios privados del Ayuntamiento de Málaga (FCC, Urbaser y Sando), a través de la asistencia contratada, hayan valorado la fórmula jurídica más viable para evitar un nuevo conflicto, la opción elegida ha sido la de seguir adelante con la idea inicial basándose en el real decreto 17/1977 sobre relaciones laborales, según pudo saber este periódico. La empresa se agarra al artículo 8.2 donde se indica literalmente que el pacto que ponga fin a la huelga tendrá la misma eficacia que lo acordado en convenio colectivo".

De esta forma, Limasa quiere evitar que la Junta rechace aprobar el convenio por la falta de acuerdo con el comité y tener que acudir al Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) para iniciar una nueva negociación, lo que además retrasaría aún más la publicación definitiva del convenio que pondría fin definitivamente al conflicto iniciado hace dos años.

La decisión de la empresa no ha gustado nada entre el comité de empresa de Limasa. Su presidente, Manuel Belmonte (UGT), señaló que la medida unilateral adoptada por la empresa en relación al convenio "nos parece evidentemente mal" porque dijo que "nosotros siempre hemos ido de frente y está claro que ellos no".

Sobre la posibilidad de iniciar algún tipo de medida de presión al respecto, el representante sindical indicó que esperarán a que la Junta de Andalucía se pronuncie sobre la conveniencia o no de publicar de forma definitiva el convenio colectivo pese a no contar con el respaldo de ninguno de los seis sindicatos del comité "para decidir cuál será nuestro siguiente paso".

Aún así, el registro del convenio se hará efectivo esta misma semana ante la Delegación de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo en base al acuerdo firmado el pasado mes de diciembre que sirvió para desconvocar la huelga y en el que se incluían los aspectos económicos objeto de discordia entre ambas partes. La empresa defendió desde el principio que ese documento era suficiente para dar por cerrado el convenio y que el resto de los artículos se mantendrían tal y como están en el anterior. Pero el comité de empresa no lo considera así y advirtió que no firmaría el conjunto del convenio si no se negociaban el resto de los artículos y se incluían garantías para que no se produzca una regulación de empleo durante la vigencia del mismo.

El argumento de la empresa es que en el documento firmado hace dos meses se especificaba en el párrafo tercero que se modificaban los artículos 2, 3, 25, 26, 40 y 48 principales escollos que motivaron la huelga y el anexo relativo a vestuario, mientras que "el resto del articulado se mantenía igual".