Testigo de la regata de barcas de jábega y de la travesía a nado que tradicionalmente se celebran en las aguas portuarias antes del inicio de la Feria, este pasado fin de semana, los atraques de megayates malagueños han albergado a la mayor concentración de barcos de recreo privados que, hasta la fecha, han ocupado las instalaciones de IGY Málaga Marina estrenada oficialmente el pasado 15 de julio. 

Con un total de siete barcos, los muelles uno y dos han completado una ocupación del 25% del total de los amarres que puede ofrecer esta marina; una capacidad que, según han confirmado a Málaga Hoy responsables de IGY se irá incrementando en las próximas semanas. 

Teniendo en cuenta que aún quedan muchos espacios libres, la imagen de estos grandes yates, durante este pasado fin de semana, ha permitido ver juntos a barcos amarrados de punta, es decir, perpendiculares al muelle, y de costado; unas muy diferentes formas de atraque que la marina malacitana ofrece de forma personalizada a cada uno de los yates visitantes.

Pero con independencia de la forma en la que estén amarrados, esta primera gran reunión de yates, que también ha dejado la imagen de dos significativos veleros, ha destacado por la presencia del Elba que en la noche del sábado quedó amarrado en el muelle número uno. Convertido con sus 33,4 metros en el yate de mayor eslora llegado en el transcurso de este pasado fin de semana, la principal curiosidad de este barco con casco de acero y superestructura de aluminio es su construcción española; una fabricación firmada por los astilleros Armón Navia, el mismo lugar donde se construyeron los remolcadores Vehintiocho y Trheinta que en la actualidad operan en los muelles malagueños. 

Con capacidad para 33 yates, de entre 20 y 180 metros, aunque esta eslora máxima podría incrementarse, IGY Málaga Marina está plenamente operativa desde su inauguración el pasado 15 de julio; un estreno que se ha visto precedido por una serie de visitas que se iniciaron el 4 de mayo con la presencia de dos buques de recreo privados de 20 y 35 metros respectivamente. 

Ultimando mínimos detalles a pie de muelle y ya con las oficinas situadas en el cubo de cristal del muelle uno en marcha, según previsiones, la marina de megayates malagueñas espera ir incrementando el número de llegadas; unas estancias de corta y media duración que antes de que finalice el trimestre veraniego alcanzarán una significativa actividad.