Málaga

Solo 10 de las 4.000 visados de vivienda este año en la provincia de Málaga son de protección oficial

  • Los promotores piden a las administraciones que cedan suelo para que ellos puedan abaratar el precio final

  • La crisis de suministros retrasa las obras ahora mismo uno o dos meses

  • El Salón Inmobiliario del Mediterráneo (Simed) reflejará del 4 al 6 de noviembre el dinamismo del mercado malagueño

Presentación del Simed, el Salón Inmobiliario del Mediterráneo

Presentación del Simed, el Salón Inmobiliario del Mediterráneo

De las 4.031 proyectos visados por el Colegio de Arquitectos de Málaga entre enero y septiembre, solo 10 corresponden a Viviendas de Protección Oficial (VPO), el 0,25%. O, para que se entienda mejor, 2,5 por cada mil que se certifican.

El dato, demoledor, fue aportado ayer por Juan Manuel Rosillo, presidente de la Asociación de Constructores y Promotores de Málaga. Rosillo insistió, al hilo de la nueva ley de la Vivienda aprobada por el Gobierno, en que "la mejor forma de dar solución al problema del acceso a una vivienda es poner en los valor suelos públicos, haciéndolos rentables para un inversión privado; eso se hace cediendo suelo par que se puedan poner pisos en alquiler a precios asequibles".

Esta reflexión fue una de las que ofreció el principal responsable de la asociación malagueña de constructores y promotores durante la presentación del Salón Inmobiliario del Mediterráneo, Simed, que se celebrará en formato presencial los próximos 4, 5 y 6 de noviembre en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga (Fycma). En ese evento podrá consultarse la oferta de hasta 11.000 inmuebles, la mayoría en la provincia de Málaga.

El representante de los constructores malagueños dibujó, al margen de la cuestión del VPO, un panorama optimista en el que Málaga no solo recupera niveles prepandemia sino que es de las provincias más dinámicas en el ámbito inmobiliario. Las viviendas terminadas, por ejemplo, se sitúan en algo menos de 6.000 hasta septiembre, cifra ligeramente superior a la de 2019. Las ventas se cifran en 20.601 y también están en valores similares a las operaciones de hace dos años. 

Rosillo hizo una mención especial a los inmuebles de obra nueva, cuyas ventas se han disparado. "Sólo en este segmento el incremento es del 41% respecto a 2020 y del 40% respecto a 2019, hasta las 5.441 viviendas de obra nueva", afirmó.

Málaga es la quinta provincia con mayor número de compraventas y la tercera de obra nueva, el 27% del mercado inmobiliario andaluz y el 32% cuando hablamos de nueva construcción. Es, también, la cuarta provincia en la que el comprador extranjero tiene mayor peso tras Alicante, Baleares y Tenerife.

"Soy optimista respecto a un sector que está activo y llamado a ser motor económico, en una zona que es destino preferente de nuevas empresas y delegaciones de multinacionales", afirmó.

En este optimista panorama el aspecto más complicado de cara al futuro parece estar en la crisis de suministros. El encarecimiento y escasez de materias primas, reconoció Palomares, está encareciendo las obras hasta un 20% y ahora mismo los retrasos van de uno a los dos meses. El riesgo de paralización está ahí. "Estamos teniendo con las administraciones y los promotores reuniones proactivas; ellos entienden que son circunstancias externas ajenas a nosotros", dijo Rosillo, que aludió a la posibilidad de que se alarguen los plazos, o que, en el caso de la vivienda, se repercuta una parte de la subida de costes en el precio final de la vivienda. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios