La turbidez de la que se han quejado los vecinos de Carranque y Las Delicias ya tiene una explicación: una avería en una de las tuberías de abastecimiento desde el depósito de Teatinos, según Emasa. Por lo que esa oscuridad del agua de grifo que algunos vecinos han presenciado en sus domicilios no se debe a la instalación de las válvulas para controlar la presión, sino a un contratiempo puntual.

La extrema situación de sequía ha hecho que el Ayuntamiento de Málaga tome la decisión de reducir el consumo de agua de la población un 20%. Para lograrlo y cumplir con lo exigido por la Junta de Andalucía -160 litros por persona y día-, el Consistorio está disminuyendo la presión del agua en toda la ciudad. Algunos vecinos ya han empezado a notar esta medida, pero otros todavía no porque primero deben instalarse unas válvulas para controlar la presión.

Las alarmas, tras saber que estaban bajando la presión del agua en la capital, saltaron en Carranque y Las Delicias cuando los vecinos se percataron de que el agua salía “oscura”, “turbia” y “con mucha espuma”. Algunos de ellos aseguraron que para prepararse una manzanilla tuvieron que rellenar un vaso de agua hasta tres veces para conseguir el agua limpia.

Los vecinos, en un principio, creyeron que se debía a que ya habían llegado las restricciones al consumo en sus zonas, pero de momento Emasa no ha llegado a los barrios mencionados. Al conocer este suceso, la Empresa Municipal de Aguas de Málaga barajó la posibilidad de que se debiera a las obras que se están acometiendo por toda la capital para instalar válvulas para regular próximamente la presión del agua de toda la red de distribución.

Finalmente, esta turbidez, según Emasa, se debe a que se ha producido una avería en una de las tuberías de abastecimiento desde el depósito de Teatinos. La empresa para poder asegurar el suministro a la población inyectó agua a mayor presión en otra tubería, por lo que al incrementar el caudal “se han debido de mover los sedimentos del tubo”.

La regulación de la presión en la red de abastecimiento de agua de Málaga, a día de hoy, está al 20%. Esto quiere decir que por ahora más de 360 kilómetros de la red de distribución tienen menos presión. A Emasa le quedan alrededor de 1.540 kilómetros, ya que la red en total tiene más de 1.900. Las zonas que ya viven con esta restricción son Churriana, Cortijo Mazas, El Olivar, Campanillas, Guadalmar, zona comercial de Plaza Mayor y alrededores, barriada de la Princesa y la Isla, La Araña, zona baja de Pedregalejo (desde Baños del Carmen hasta Playa Virginia), Palmilla, Paseo Marítimo de Pacífico y alrededores, polígono del Guadalhorce y alrededores de Héroe de Sostoa.

Esta regulación, que se lleva a cabo en horas valle y de menor demanda, principalmente de noche, comenzó a aplicarse en algunas zonas donde la presión es mayor y las viviendas tienen menos altura (a más presión en las tuberías, mayor potencialidad de cantidad de agua fugada) obteniéndose una minoración de las pérdidas que llegan incluso al 50%. En base a estos resultados, el Consistorio irá extendiendo progresivamente esta práctica por toda la ciudad con la previsión de completar el plan en un plazo aproximado de tres meses.