Amama llevará a la Fiscalía 22 denuncias en Málaga por los fallos en los cribados de cáncer de mama

La Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama de Sevilla (Amama) ha anunciado la presentación de 22 denuncias en Málaga relacionadas con fallos en el programa de cribado de cáncer de mama del Servicio Andaluz de Salud. Estas denuncias se suman a otras ya formalizadas en Andalucía por los retrasos en la comunicación de los resultados de mamografías, que en algunos casos habrían tenido consecuencias graves para la salud de las mujeres afectadas.

Según la presidenta de Amama, Ángela Claverol, los casos malagueños forman parte de un conjunto de 223 expedientes ya estudiados en toda la comunidad autónoma. No obstante, la asociación subraya que esta cifra dista mucho de la que maneja la Consejería de Salud, que el lunes cifró en 217 las mujeres que aún esperan una mamografía de respaldo. Amama calcula que son más de 4.000 las mujeres que podrían haber sufrido algún tipo de perjuicio por estas demoras, y asegura que cada día aparece una nueva afectada dispuesta a contar su caso.

Las denuncias malagueñas llegarán junto a las que ya se preparan en Sevilla, donde se supera la cifra de 150 casos analizados, así como otras procedentes de Cádiz, Huelva, Jaén, Granada y Almería. La asociación también ampliará esta semana la denuncia en Fiscalía con seis nuevos testimonios relacionados con el supuesto borrado de resultados, un hecho que consideran especialmente grave y que, afirman, todavía no se ha esclarecido.

Claverol lamenta que el problema sea aún mayor de lo que se ha reconocido públicamente porque, asegura, muchas mujeres tienen miedo a denunciar o exponer públicamente lo ocurrido. La dirigente de Amama muestra además su decepción con la Consejería de Salud, tras perder, dice, la confianza que habían depositado en el nuevo equipo. Asegura que se sienten ignoradas y tratadas como un estorbo en lugar de como parte de la solución.

Prueba de ello, denuncian, es lo ocurrido en la última reunión de la Comisión de Seguimiento del Cribado del Cáncer, a la que acudieron tras haber sido obligadas a firmar un acuerdo de confidencialidad que no se habría requerido al resto de participantes. La asociación decidió levantarse de la mesa tras constatar que tampoco se les permite intervenir en el Parlamento andaluz para trasladar allí la situación de las afectadas. “Si no me dejan hablar en el Parlamento y tampoco puedo hablar aquí, ¿a qué vengo? ¿A hacerme una foto? Nos quieren calladitas y sumisas”, afirmó Claverol con contundencia.

Frente a las acusaciones de politización, insiste en que se reunirá “con quien haga falta” si eso sirve para mejorar la atención sanitaria y evitar que más mujeres sufran retrasos que puedan afectar a su diagnóstico. “Yo no quiero hablar de política, quiero hablar de sanidad pública. No quiero que se mueran”, declaró, reclamando más investigación, más personal y una mejora urgente del sistema de cribado.

También la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) exigió este martes mayor transparencia e información detallada sobre el alcance real del problema y sobre las medidas que se están adoptando para solucionarlo. Su representante en Andalucía, Magdalena Cantero, señaló que confía en que la Comisión de Seguimiento se mantenga como un espacio “eficaz y transparente”, siempre en beneficio de las pacientes y de la calidad del sistema sanitario público andaluz.