Esterilizar mascarillas para reutilizarlas ante un “clamoroso” déficit que angustia a los profesionales de los centros sanitarios, que están en primera en primer línea de batalla frente al coronavirus. ¿Cómo sería esa esterilización? “Lavándolas con soluciones hidroalcohólicas o planchándolas”, apuntaba un cualificado profesional de la sanidad privada. Es una alternativa que barajan los hospitales.

El problema afecta tanto al sector privado como al público. Esa fuente añadía:“Con la progresión que llevan los contagios, de continuar esta situación, el material nos va a faltar a todos, públicos y privados”.

Un representante sindical también aseguraba que lo de esterilizar y reutilizar las mascarillas es una opción que se está barajando: “Pero ni siquiera saben si esa alternativa es viable. Lo cierto es que la situación es grave y que se están racionando”.

Una sanitaria de un hospital público comentaba que este miércoles, al arrancar su turno, su jefa le dio una mascarilla y le dijo:“Te tiene que durar dos días”. Otro trabajador afirmaba:“Hay escasez en todo tipo de material de protección, pero la falta de las mascarillas más básicas es brutal. Tenemos los días contados para que nos quedemos sin nada”.

El déficit del material para que el personal se proteja y la preocupación por su escasez son reales. Pero la bronca política ensucia y enreda el problema precisamente cuando miles de ciudadanos están confinados en sus casas y cientos de profesionales se dejan la piel exponiéndose a contagios para cuidar la salud de los demás.

Trabajadores de los centros sanitarios denuncian la escasez y temen por su seguridad

Este miércoles corrían como la pólvora dos mensajes de Whatsapp: uno con la carta del consejero de Salud, Jesús Aguirre (PP), al ministro de Sanidad, Salvador Illa (PSOE), en la que achacaba la falta de mascarillas a la reciente intervención de 150.000 unidades por parte del Gobierno en Alcalá la Real (Jaén) y otro con un audio de una trabajadora que decía ser del “Carlos Haya” que acusaba al “listillo” del ministro de “robar” las mascarillas con la requisa hecha en la localidad jiennense.

En la carta –fechada el martes 17 y filtrada a la prensa–, el consejero indica que el requisamiento de 150.000 mascarillas ha dejado a la sanidad pública en una situación de “absoluta precariedad” ya que este era su principal proveedor y mantenía un suministro de 200.000 unidades semanales. Por eso, Aguirre concluye su misiva pidiendo a Illa que ante este escenario de “extrema gravedad” garantice “de manera inmediata a los andaluces el suministro suficiente para atender las necesidades descritas y que por parte de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía se tenían perfectamente programadas”.

El PSOE andaluz en su cuenta de Twitter lamentó que “desde el gobierno andaluz se fomenten bulos que alertan a la sociedad cuando debe primar la lealtad institucional”. Por su parte, el secretario provincial socialista, José Luis Ruiz Espejo, informaba en un tuit que el Ejecutivo español “ha comenzado el reparto de mascarillas” entre las comunidades autónomas.

Más de un millón, según una nota de prensa del Ministerio de Sanidad. Madrid, por ser la región con mayor número de positivos, será la que recibirá el número más elevado, según ese comunicado. Según el Ministerio, el millón de mascarillas incluye partidas que suman un total de 546.000 que ya han empezado a repartirse y otras 500.000 unidades donadas por China. Pese a la consulta de Málaga Hoy, el Ministerio no concretó cuántas vendrían para Málaga –la provincia andaluza con más infectados–, ni cuando.

Representantes socialistas tacharon de “mezquina y desleal” la utilización del tema por parte de los responsables autonómicos andaluces. Y explicaban que con el estado de alarma se hace una gestión “centralizada” de ese material que posteriormente se repartirá a los centros “equitativamente”.