La deuda de la firma del hotel de Moneo sube otro millón por recargo e intereses
Promociones Braser sigue sin satisfacer el pago de 4,8 millones ocho meses después de que finalizase el plazo marcado
La factura económica que pesa sobre la promotora del hotel diseñado por Rafael Moneo en Hoyo de Esparteros, Promociones Braser, suma y sigue. Al punto de que hoy está rozando los 6 millones de euros a satisfacer ante el Ayuntamiento de Málaga. De esta suma, 4,8 millones se corresponden con el pago pactado entre las partes según el convenio urbanístico firmado en 2008, aún pendiente de ser satisfecho, mientras el millón restante se corresponde con el recargo y los intereses de demora acumulados desde que se inició el cobro de la primera cantidad por vía ejecutiva.
La Gerencia de Urbanismo inició este procedimiento a principios de pasado mes de julio, con el fin de cobrar la deuda contraída por Braser tras incumplir en hasta dos ocasiones los plazos marcados para la aportación de los mencionados 4,8 millones de euros. Ello supuso el envío de la deuda a Gestrisam, organismo encargado de tramitar estas cuestiones.
Fuentes municipales indicaron que de acuerdo con el procedimiento reglado, el ente económico puso en conocimiento del deudor los apremios correspondientes para que se hiciese cargo del débito, lo que posteriormente llevó aparejado la aplicación de un recargo del 20% sobre la cantidad total (lo que supone unos 960.000 euros) y los intereses de demora (un concepto que va sumando a cada día que pasa sin que se pague la deuda).
Las fuentes, dado que el citado apremio fue comunicado hace varias semanas, indicaron que "es posible que ahora mismo se esté cerca de iniciar el procedimiento de embargo". Ello no supone, sin embargo, una efectividad inmediata, ya que suelen transcurrir varios meses en los que la promotora puede reaccionar y hacer frente a la deuda.
Desde que finalizó la primera de las fechas para satisfacer esa obligación económica han transcurrido ya ocho meses, sin que haya un calendario claro para revertir la situación. Desde la empresa se insiste en que se están ultimando los trámites para disponer de la financiación necesaria para llevar adelante el proyecto hotelero y disponer de los fondos con los que cumplir con el Consistorio.
Esta iniciativa privada ha sido objeto de una importante polémica en los últimos meses, al punto de que todos los grupos de la oposición llegaron a reclamar al equipo de gobierno del PP el mantenimiento del edificio de La Mundial, que será demolida para la ejecución del hotel de cuatro estrellas de Moneo. Sin embargo, la materialización de esa idea podría tener importantes consecuencias económicas para el Ayuntamiento.
Los propios datos manejados por Urbanismo, pendientes de ser ratificados en un informe jurídico encargado hace semanas a los servicios internos, apuntaban a que la anulación del convenio urbanístio con Braser podría obligar al Consistorio a pagar unos 16 millones de euros a la empresa. Ello como consecuencia de la ordenación urbanística que se aplica para la mencionada parcela. Todos los grupos están pendientes de que el citado informe vea la luz para conocer las conclusiones del mismo y si se abre o no la puerta a una posible anulación del acuerdo.
El hotel de Moneo hunde sus raíces en hace ya más de diez años, momento en el que se iniciaron los trámites para adecuar urbanísticamente la parcela. Discurrido ese lapso de tiempo y tras un prolijo procedimiento administrativo, la iniciativa sigue sin impulsarse de manera definitiva. No obstante, el principal escollo en los últimos tiempos hay que buscarlos en la necesidad de Braser por disponer de financiación, tarea a la que se vienen dedicando sus responsables en los últimos meses.
La previsión manejada hasta la fecha fija la apertura del hotel, que será de cuatro estrellas y estará explotado por Vincci, a mediados de 2017. El establecimiento supondrá una inversión de 30 millones de euros, contará con diez plantas de altura y 138 habitaciones. A estos números hay que sumar 220 plazas de garaje subterráneas, un restaurante-cafetería con terraza, salón de celebraciones, terraza con piscina, bar y vistas al casco histórico.
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