Este martes, el puerto de Málaga despedirá al submarino de la Marina Real de los Países Bajos Zeeleeuw S 803 que ha estado realizando una escala de descanso. Llegado en la noche del viernes día 3, los remolcadores Vehintiocho y Trheinta fueron los encargados de auxiliarlo en su maniobra de atraque; un amarre que tuvo lugar en el muelle de levante.

Consignado por la agencia Cabeza Marítima, la visita de esta unidad, aun tratándose de una prototípica estancia de un buque de guerra que llega a puerto para dar descanso a su dotación, ha participado de una muy especial circunstancia; un hecho que ha llevado a que toda la tripulación quedara alojada durante las noches de la escala en hoteles, una circunstancia que realizan la gran mayoría de los submarinos que efectúan atraques de este tipo en aguas malagueñas.

Atendiendo a esta curiosidad, por otra parte lógica debido a que estas unidades navegan en inmersión la mayoría del tiempo, estos hospedajes externos también posibilitan que los marinos que trabajan en este submarino, en concreto 52, puedan disfrutar de pequeños recorridos turísticos mientras a bordo queda una dotación reducida en régimen de guardias.

Aprovechada también la estancia para efectuar pequeñas reparaciones además de tareas de limpieza, avituallamiento y suministro de combustible, las medidas de seguridad impuestas para un buque militar y el intenso tráfico crucerista de estos días han propiciado que el submarino haya pasado su fin de semana malagueño atracado en el muelle de levante sin la posibilidad de ser visto o visitado.

Frente a esta limitación que ha impedido que muchas personas, al menos desde una cierta distancia pudieran observarlo, el S 803 destaca por ser el primer submarino que visita el puerto de la Capital de la Costa del Sol en lo que llevamos de año.

Con el recuerdo de la escala que en junio del pasado ejercicio realizó Tramontana S-74 de la Armada española que sí pudo ser visitado durante su atraque en el muelle dos, la última estancia de un submarino de otra marina militar tuvo lugar en septiembre de 2021; fecha en la que el Dolfjin, también de Países Bajos y que curiosamente es gemelo al Zeeleeuw, amarró junto a un buque auxiliar en el muelle de levante.

Una nueva escala de descanso de una unidad militar en las aguas del puerto; la de un submarino de 76 metros de eslora y 8 de manga que este martes dejará las aguas malagueñas.