El fondo de inversión catarí de la torre del puerto de Málaga obtiene también la adjudicación de la Marina de San Andrés
Su propuesta es la que recibió más puntos en el apartado técnico y la más elevada económicamente
"Va a ser un proyecto transformador en la zona Oeste de Málaga, creará una nueva centralidad en la ciudad", ha afirmado Carlos Rubio
Málaga/La Marina de San Andrés, el puerto deportivo a dos horas y media de Madrid, ya tiene quién la levante. Después de que el pasado 27 de enero se informase de las tres propuestas presentadas, esta mañana el Consejo de Administración del Puerto de Málaga ha decidido que sea la de Marina San SL, sociedad creada por el fondo catarí Al Alfila que también promueve la torre en el Dique de Levante del Puerto de Málaga. No ha saltado la sorpresa, puesto que el pasado jueves ya destacó como la mejor situada, sobre todo por su oferta económica.
En este sentido, el presidente del Consejo de Administración del Puerto de Málaga, Carlos Rubio, ha destacado en declaraciones a este periódico que si bien las tres propuestas técnicamente eran de un gran nivel, la que ha resultado la propuesta ganadora ya estaba por delante y, una vez se abrieron los sobres con la propuesta económica esta era muy superior. Se estima que el impacto socioeconómico total, durante el periodo concesional de 50 años, sea 785,9 millones de euros (unos 15,7 millones de euros al año).
Según explicó el Puerto en un comunicado, la empresa ha obtenido 45,27 puntos, mientras que las otras dos ofertas se han quedado con una valoración de 37,33 puntos, en el caso de San Andrés Marina Banús, SL; y de 35,63 puntos, para la UTE conformada por Formentera Mar, S.L y Ailana Cubed, SL. Suponiendo casi 10 puntos más que las otras dos ofertas presentadas.
El proyecto adjudicado está conformado por Al Alfia como grupo inversor; Island Global Yachting (IGY) como socio tecnológico; y Ocean Capital Partners (OCP) junto a Estudio Segui Arquitectura como ingeniería del mismo.
Aún es pronto para que se marque un plazo para la finalización de las obras, asegura Rubio, que ha añadido que aún "quedan unos meses para que se empiece a construir". En este sentido ha dicho que es "precipitado" saber si estaría disponible para acoger la Copa América de Vela en 2024 como ha estado sonando esta semana.
El presidente ha asegurado que este proyecto "va a ser un proyecto transformador para la zona oeste de Málaga y que supondrá la creación de una nueva centralidad en la ciudad". El proyecto del puerto vendrá acompañado por el nuevo auditorio, que ya cuenta con un proyecto adjucatario, lo que, junto al proyecto de El Bulto, supondrá para Rubio el nuevo eje de la ciudad.
En cuanto a empleos, asegura Rubio que sus estudios hablan de un mínimo de 700 empleos indirectos y directos en los próximos años, sin tener en cuenta la mano de obra necesaria para efectuar la obra. De estos, detalla el Puerto de Málaga que se crearán 70 puestos directos, un empleo indirecto de 590 trabajadores y un empleo inducido de otros 741.
La nueva marina ocupará un espacio de más de 100.000 metros cuadrados en la zona oeste del puerto de Málaga, en la margen derecha del río Guadalmedina, con capacidad para 566 embarcaciones de recreo entre 8 y 30 metros de eslora (se precisa que deberán permitir hasta 50 metros de eslora). A cambio de la inversión necesaria, el futuro concesionario dispondrá de un periodo de explotación de 50 años.
Competencia de Puerto Banús
En este sentido, Rubio no cree que nazca con vocación de competir con Puerto Banús, sino que considera que tienen "vocaciones diferentes y son complementarias". En este sentido, apunta a que la Marina de San Andrés viene a dar servicio a una ciudad de más de 600.000 habitantes que cuenta con dos pequeñas marinas en el Club Mediterráneo y El Candado, pero que no son suficientes para la demanda que puede tener la ciudad de un puerto deportivo.
La futura concesión contará con una superficie de dominio público portuario de 123.935 metros cuadrados, divididos en 96.071 metros cuadrados de lámina de agua y 27.864 metros cuadrados de zona terrestre, con capacidad para 566 embarcaciones de recreo entre 8 y 30 metros de eslora.
La marina estará destinada a un uso ciudadano-portuario, que incluirá un complejo náutico con una escuela de vela y otras enseñanzas del mar, zona de restauración, pequeño comercio y tiendas especializadas, así como un club social.
La dársena dispondrá, además, de diversos espacios para un uso exclusivamente portuario, tales como una torre de control, naves para talleres y almacenes, así como una marina seca con capacidad para acoger 300 embarcaciones.
El puerto deportivo se enmarca en el proyecto contemplado en el Plan Especial del Puerto de Málaga para revitalizar la zona oeste del dominio público-portuario, correspondiente a la plataforma de San Andrés, en el que también se ubicarán un auditorio, un edificio cultural y la sede del Instituto Oceanográfico. Éste último se encuentra en la última fase del proceso de construcción.
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