Málaga

Casi el 62% de médicos agredidos el año pasado en Málaga no puso denuncia

  • El perfil de las víctimas es el de una facultativa joven y el del agresor, el de un hombre

Pedro Navarro (izq.) y Antonio Martín, este jueves, en la rueda de prensa.

Pedro Navarro (izq.) y Antonio Martín, este jueves, en la rueda de prensa. / M. H.

El año pasado se registraron en los centros sanitarios de la provincia de Málaga, entre todas las categorías, 187 agresiones. De ellas, 26 fueron a médicos. Pero de esta cifra, sólo 10 facultativos pusieron una denuncia. Es decir, que casi el 62% de los médicos atacados física o verbalmente no denunciaron. “Animamos a los profesionales a denunciar las agresiones porque las estadísticas sólo son la punta del iceberg. Hay que denunciar para erradicarlas”, instó el presidente del Colegio de Médicos de Málaga, Pedro Navarro. Miedo, vergüenza, tristeza e incluso la reticencia a afrontar los trámites que supone una denuncia llevan a casi dos tercios de los facultativos a no interponerla nunca.

“No podemos pasar de héroes a villanos, de los aplausos a las agresiones. El médico no es el responsable de las listas de espera, de que un medicamento no se pueda recetar porque no está financiado o del retraso en las derivaciones al especialista. El médico es el que da la cara, pero no es el responsable”, aclaró Navarro.

El perfil de las víctimas es el de facultativas jóvenes. “El agresor las ve más débiles”, explicó el presidente del Sindicato Médico de Málaga, Antonio Martín, que añadió que un ataque físico o verbal marca al profesional porque es “un momento traumático”. De los 26 facultativos agredidos en 2021, 16 fueron mujeres y de éstas, la mitad era menor de 35 años.

El perfil del agresor es el de un varón “antinormas que exige cosas que no están en manos del facultativo”. Un matiz importante: tres de cada cuatro no tienen problemas psiquiátricos, es decir que son plenamente conscientes de sus actos.

En una rueda de prensa conjunta del Colegio y el Sindicato con motivo del Día Europeo contra las Agresiones a Sanitarios –que es este 12 de marzo– ambas instituciones insistieron en la “tolerancia cero” ante esta lacra.Según los datos de la organización colegial, en 2016 se registraron 25 agresiones a facultativos en la provincia de Málaga, en 2017 hubo 27, en 2018 otras 28 y en 2019 se incrementaron a 45. En 2020 se produjo una caída, dado que el total de ataques verbales o físicos contra médicos fue de 21. Un descenso que se atribuye al confinamiento, la menor atención presencial, la disminución de la afluencia a los centros por temor al contagio del Covid, el aumento de la vigilancia en la red sanitaria y las restricciones en el número de acompañantes. Pero en 2021, las 26 agresiones contra facultativos suponen que “las cifras están volviendo a las que había antes de la pandemia”, advirtió Navarro. Por su parte, Martín resaltó que el 38,5% de las agresiones de 2021 ocurrieron en el último trimestre, “coincidiendo con la sexta ola y la sobredemanda” que generó sobre todo en los centros de salud y las Urgencias de los hospitales.

Ante un problema que no cesa, ambos colectivos reclamaron medidas preventivas y sancionadoras. Entre las primeras, la adecuación de las plantillas, la eliminación de la práctica de citar a varios pacientes a la misma hora [cuando no hay hueco para atenderlos], la elaboración de un mapa de riesgo de agresiones, el refuerzo de los vigilantes de seguridad, la videovigilancia en “todas” las zonas comunes de los centros y la simplificación de los trámites para la denuncia. Los médicos también demandan que en la historia digital de una persona que ha cometido una agresión en un centro sanitario se advierta de ese hecho para que el profesional esté prevenido.

Entre las medidas sancionadoras, demandan que, además de las penales, al agresor se le reclamen los daños ocasionados y se le apliquen multas para que no salga tan barato agredir. También piden que las órdenes de alejamiento de los centros que disponen algunas sentencias, se apliquen de verdad y no queden en papel mojado. A la Administración, los médicos le requieren más implicación. Por ejemplo, denunciando de oficio o personándose en la causa como acusación. En la actualidad, si un profesional agredido decide no denunciar, tampoco la Administración lo hace. De modo que puede darse la situación de que el sistema sanitario denuncie al agresor por romper una puerta, pero no por herir a un trabajador.

“Le pedimos a la Administración que esté con nosotros”, dijo Navarro. El Colegio y el Sindicato inician una campaña de radio con motivo del Día Europeo contra las Agresiones de cara a concienciar a la población de que la agresión no es la solución.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios