Málaga

Los médicos de la privada de Andalucía se unen para luchar contra los bajos precios de las consultas

Alfonso Carmona, Jorge Fernández y Pedro Navarro en la presentación del II Barómetro de Medicina Privada de Andalucía.

Alfonso Carmona, Jorge Fernández y Pedro Navarro en la presentación del II Barómetro de Medicina Privada de Andalucía. / M. H.

Los médicos de la sanidad privada siguen luchando por mejorar sus condiciones laborales. Los facultativos denuncian que les continúan pagando las consultas a 10 euros, aunque los especialistas obtienen algo más. Esto ha hecho que gran parte de los profesionales que se dedican a trabajar en la sanidad privada consideren que sus honorarios son “insuficientes”. Por ello, exigen mejores honorarios que no les obliguen a atender a 60 u 80 pacientes al día y que les paguen cuando corresponde, no a los cuatro meses. 

Actualmente en Andalucía hay 11.032 médicos ejerciendo en la privada de los 35.611 que ejercen, algunos de ellos se dedican exclusivamente a esta sanidad y otros la combinan con la pública. A este grupo mixto pertenecen 3.225 profesionales andaluces y los que se dedican solo a la privada son 7.747.

El Consejo Andaluz de Colegios de Médicos (CACM) ha analizado la situación en la que se encuentran los facultativos de la medicina privada y este martes ha presentado los resultados con el II Barómetro de la Sanidad Privada de Andalucía. Los resultados indican que el 59% de los médicos encuestados trabaja en la sanidad privada exclusivamente y el resto en ambas. Algo que destacan de estos datos es que el 51,5% de los médicos de la medicina privada trabajan por prestación de servicios en hospital privado y el 28,2% ejercen en una consulta alquilada en un centro policlínico. Por lo que esto significa que la mayoría de los facultativos de esta medicina no cuentan con una consulta particular, ya que esos son solo el 36,3%.

En cuanto a los honorarios, el 99% consideran que los que abonan las compañías son “muy insuficientes” e “insuficientes”. Además, el 81% de los encuestados asegura no estar de acuerdo con la forma de pago de las compañías y también el 99% señala que las compañías se demoran en pagarles entre uno y cuatro meses. De igual forma, el 77% de los encuestados considera que las aseguradoras han puesto en marcha una estrategia para conseguir que los pacientes acudan directamente a sus centros propios.

Ante esta situación, el 99% considera que es necesaria implementar la subida del IPC en los baremos de la compañía y el 89% ve que una solución ante la pérdida de libertad puede ser que estos profesionales vuelvan a tener sus propias claves de facturación.

En este punto, Jorge Fernández Parra, presidente del Consejo Andaluz de Colegios de Médicos, ha asegurado que con este barómetro han observado que sigue habiendo un descontento generalizado entre los profesionales de la privada y que se deben mejorar las condiciones laborales de estos facultativos. Por lo que, ha incidido en que el Consejo Andaluz debe actuar y hacer propuestas para hacer frente a esta situación.

Un médico de familia cobra entre 10 y 12 euros por una primera consulta

Actualmente, un profesional de la medicina privada que ejerce de médico de familia cobra por la primera consulta entre 10 y 12 euros, en la segunda obtiene cinco o seis euros y a partir de la tercera no se le paga. En el caso de un médico especialista la consulta está en 15 euros. 

Se podría pensar que un médico privado podría decidir no trabajar con una compañía, pero con esta situación, para muchos es algo imposible. Los que se ven obligados a vivir esto día a día son, sobre todo, médicos de familia y pediatras. Los únicos profesionales que pueden ejercer sin compañías son los dermatólogos -que son pocos y están muy demandados- y los de ciertas cirugías como la plástica.

En esta línea, Pedro Navarro, presidente del Colegio de Médicos de Málaga ha señalado que “no es fácil ejercer la medicina privada sin compañías”. Ante esta situación, se ha puesto a sí mismo de ejemplo y ha señalado que, tras sus 40 años como profesional, sus pacientes “vienen a la consulta dos veces y a la siguiente ya lo hacen con póliza porque creen que me están pagando lo mismo y a ellos les sale más barato”.

Los facultativos exigen que los contratos se hagan por escrito, poder negociar con las compañías y mejores sueldos

Por ello, entre sus reivindicaciones están el conseguir unos honorarios dignos, lograr esa subida del IPC en los baremos de la compañía que no se ha hecho en los últimos 30 años, recuperar su papel negociador con las compañías y la formalización de los contratos por escrito.

Este último año, según Navarro, se han reunido en todas las sedes colegiales de Andalucía con los profesionales que ejercen en la privada y también han tenido encuentros con las diferentes compañías con las que trabajan los facultativos de forma individual. Tras los encuentros, les aseguraron que veían bien sus reivindicaciones, pero a pesar de esta respuesta, el presidente de Commálaga sostiene que “estamos dando los primeros pasos y no vamos a cesar en reivindicar y trabajar”. Asimismo, están esforzándose en crear un registro de contratos precarios para tener una línea de actuación más coherente y también trabajan con la Consejería de Salud para que los médicos de la privada tengan acceso a la biblioteca virtual del SAS.

Los profesionales quieren mejores condiciones para ejercer "con calidad"

Por su parte, Alfonso Carmona, presidente del Colegio de Médicos de Sevilla, ha incidido en que “nadie está contra nadie y menos los médicos”. Los profesionales quieren llegar a un acuerdo con las compañías porque “no se puede trabajar viendo a 60 u 80 personas al día. Queremos ejercer con calidad, dar el mejor trato y que nos permitan estudiar”.

Su objetivo es “dialogar con estos grupos empresariales para llegar a un acuerdo para que todo vaya en una marcha normal y adecuada”. Quieren darles el tiempo que necesiten para que todo funcione, pero si no llegan a un acuerdo, Carmona sostiene que tienen derecho a convocar protestas y concentraciones, ya que al igual que estas compañías han ido subiendo sus primas, ellos quieren tener ese reconocimiento, tanto económico como social, para trabajar dignamente y conseguir que los jóvenes no se vayan a otros países a ejercer la medicina.

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