La rehabilitación de la plaza de toros de La Malagueta, en la que se han invertido 5,3 millones de euros, ha permitido recuperar la fachada original con la que se construyó el coso en 1874, de ladrillo visto, que fue revestida en los años 30 del pasado siglo con cemento y pintada de blanco.

Al acto de reinauguración han asistido este miércoles en Málaga el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente de la Diputación malagueña, Francisco Salado, entre otras autoridades.

Con un aforo de unas 10.000 personas, la última actuación importante que había recibido la plaza, declarada Bien de Interés Cultural (BIC), fueron unos refuerzos estructurales en los años 70, por lo que presentaba un gran deterioro, ha informado en un comunicado la Diputación, que como propietaria del coso ha ejecutado su rehabilitación.

Se ha procedido a la limpieza e impermeabilización de las gradas del tendido, la eliminación de los problemas de humedades que habían deteriorado las fachadas y elementos decorativos y la consolidación de los forjados, con refuerzos estructurales, además de mejorar las condiciones de seguridad de las barandillas exteriores.

Autoridades en el acto de reapertura de la plaza de toros de La Malagueta.

También se han reubicado todas las áreas técnicas taurinas en un mismo sector, se ha remodelado la enfermería, se han instalado dos ascensores para mejorar la accesibilidad, se ha incrementado el número de aseos y de instalaciones eléctricas y de saneamiento y se ha instalado iluminación artística con proyectores LED.

Durante las obras, en las que han participado unos 90 trabajadores, se han utilizado 77 toneladas de acero para estructuras metálicas y refuerzos, 400 metros cúbicos de hormigón armado, más de 10 kilómetros de cableado de distintos tipos y 380 toneladas de albero, y se han generado unos 4.000 metros cúbicos de escombros.

Además, el próximo otoño concluirán los trabajos para dar nuevo uso cultural al recinto, que podrá así tener uso no solo durante los días de espectáculos taurinos.

El proyecto de uso cultural prevé un centro de conferencias y eventos con dos salas para unos doscientos espectadores en total, además de haberse remodelado el actual museo, y habrá una zona para exposiciones temporales en la planta baja y un área de exposición permanente y una cafetería-restaurante en la planta alta.

Las distintas actuaciones suponen una intervención en una superficie construida de espacios cubiertos de unos 9.000 metros cuadrados y otros 3.900 metros cuadrados de espacios descubiertos (tendidos y corrales).