El litoral oeste de Málaga se está delimitando cada vez con más precisión. Desde Huelin hasta Sacaba se agolpan los proyectos urbanísticos que pretenden marcar el skyline de la ciudad, siendo el más importante de los que se están desarrollando en estos momentos las tres torres de 21 plantas que ha diseñado el arquitecto Carlos Lamela. Este viernes la que se sitúa más al oeste ha culminado en altura –la central ya lo había hecho–, elevando su estructura hasta los 71 metros. 

Con un porcentaje de venta superior al 85%, según ha detallado el CEO de Sierra Blanca Estates, Carlos Rodríguez, los compradores se dividen en cerca de un 60% nacionales, siendo el resto foráneos, entre los que destacan checos, británicos, polacos, estadounidenses o mexicanos. Una de las últimas ventas sonadas la hizo un comprador checo, que adquirió los dos pisos de la planta 18 por ocho millones de euros –a cuatro millones de euros por vivienda–, elevando el precio medio de compra a 1,3 millones. 

Culminada la estructura, la parte más complicada de toda la edificación, quedarían siete meses para terminar los interiores de las viviendas, de manera que en junio de 2023 puedan estar finalizadas, a falta de la entrega de llaves, según detalla el propio Rodríguez. La torre se desarrollará en una parcela de más de 55.000 metros cuadrados, con una inversión próxima a los 75 millones de euros. Se espera que su valor en el mercado ascienda por encima de los 100 millones de euros.

Quedan por finalizar, y vender, los áticos del edificio, joya de la corona que, además, contarán sendas piscinas privadas en sus terrazas. Desde la misma, tendrán acceso a la zona común de la planta superior, en la que está proyectada la piscina comunitaria estilo infinity pool (el borde que mira al mar da la impresión de no terminar en el horizonte). Se espera que sean los más caros (tanto por la superficie, como por las vistas de las que gozarán).

El arquitecto que ha diseñado el proyecto, Carlos Lamela, ha afirmado que este es su proyecto "más interesante en todo el litoral español, tanto peninsular como insular" y destacando que el ayuntamiento "ha puesto todas las facilidades posibles y la disposición ha sido máxima, que no es común". 

El apoyo público a Sierra Blanca, ha sido constante desde el primer momento en el que el proyecto se gestó, han afirmado tanto desde la empresa como el propio Lamela. Este, se ha visto refrendado la colocación de dos enormes lonas, cubriendo la fachada principal y la fachada oeste de la torre, a través de la cuales Sierra Blanca Estates ha querido mostrar su absoluto apoyo a la ciudad en su candidatura a la Expo 2027. “Sierra Blanca Estates apoya a la ciudad de Málaga como sede la Expo 2027” y “Visite, disfrute, invierta y viva en Málaga” son los dos mensajes desplegados en gran formato sobre las obras de la fachada de la torre.

“Sierra Blanca Tower es nuestra primera apuesta por la consolidación internacional de Málaga como una ciudad y destino en el que vivir, invertir, disfrutar y visitar con amplias garantías de calidad y hospitalidad. Nos sumamos al apoyo y al convencimiento de que esta ciudad está preparada para acoger eventos internacionales como la Expo 2027 y proyectos de impacto y valor como nuestra torre” ha expresado Pedro Rodríguez, presidente y fundador de la promotora.

Estamos en busca de nuevos proyectos en Málaga

Tan contentos están desde Sierra Blanca Estates con la evolución de la torre que promueven en la capital, que ya están "valorando otras inversiones y esperando que cristalicen", señala Carlos Rodríguez. El mismo Rodríguez asegura que este proyecto es la constatación de que "a pesar de las dudas de muchos sectores de que no habría demanda para un proyecto de tan alta gama en esta ubicación, Málaga ha llegado a la escena mundial como un destino de lujo".