En medio del éxtasis final del primer partido en casa del Málaga CF en Primera RFEF pasó algo desapercibido el debut de Antonio José Cordero Campillo. Antoñito salió en la carga final, en la última tanda de cambios de Pellicer antes del descuento. Tuvo una participación trascendente en el gol de la victoria. Salvó a la desesperada un balón que se perdía y que derivó en el córner que botaría Juan Hernández y cabeceó Galilea. El joven jerezano (14/11/2006) se convirtió en el cuarto jugador más joven de la historia en debutar con el Málaga (incluidos Club Deportivo y Club de Fútbol). Lo hizo en el partido ante el Atlético de Madrid B con sólo 16 años, nueve meses y 17 días.

Sólo tres jugadores vistieron la primera elástica malaguista con menos edad que Cordero. Lo hicieron más jóvenes Fabrice Olinga (16 años 3 meses y 6 días, en 2012, con aquel recordado tanto en Vigo), Juanmi Jiménez (16 años 8 meses y 7 días, en 2009) y Emilio Pérez (16 años 9 meses y 5 días, en 1986). Supera Cordero al mítico Basti, ahora miembro de la Fundación del club, que lo hiciera con 17 años 2 meses y 17 días, en 1991. Andrés Caro, Mastour, Antonio Manuel, Matías, Fernando, Diego López, Edu Ramos, Ador e Iván Jaime fueron otros jugadores que debutaron aún menores de edad con el primer equipo.

Cordero no hizo la pretemporada con el primer equipo, sino que estuvo con el filial siendo juvenil de segundo año, de la quinta de Izan Merino. Esta semana estuvo entrenando con el primer equipo con Álex Contreras, también de su edad. Va a ser una tónica esta temporada en el equipo de Funes, contar con mucha gente joven después de la salida de muchos jugadores del segundo equipo por edad y tema económico. Le gustó a Pellicer, que ya lo conocía, lo que vio y decidió convocarlo y darle la alternativa en los últimos minutos. Previamente ha pasado por las canteras de Cádiz, Betis y Sevilla, de donde llegó al Málaga. Llamó la atención el año pasado y Duda le amplió su contrato en noviembre de 2022 (cuando cumplió los 16) hasta 2025 cuando había interés de otras canteras.

Cordero es un mediapunta, que puede actuar como segunda punta y por banda, como salió ante el Atlético B, de gran habilidad y calidad técnica. Se mueve bien entre líneas, tiene facilidad para la conducción y llegada a zona de remate, según quienes le ven con regularidad en el fútbol base malagueño. Es desequilibrante y tiene mucho margen de mejora por delante. Vive en la Universidad Laboral con otros compañeros y se destaca su buen comportamiento y actitud. Ha dado el primer pasito con el debut en la élite. Sin fichajes de última hora en la zona atacante, Pellicer le dio la alternativa.