Terrible diagnóstico para Ramón Enríquez: cruzado roto y menisco afectado en su rodilla derecha

Los peores presagios se han confirmado. Ramón Enríquez está roto. El centrocampista de Órgiva sufre una rotura del ligamento cruzado de la rodilla de la pierna derecha y también padece una afectación del menisco. Cuando el talentoso jugador granadino sacaba la cabeza después de un calvario de más de dos años de lesiones musculares sin fin y había enlazado varias semanas de partidos en el césped, la desgraciada acción en Almería, cuando saltó encima de un rival para evitar un golpe y cayó de mala manera, ha propiciado la desgracia. Así que ahora se abre un periodo largo de recuperación que posiblemente hasta 2026 no permite verle sobre el césped. "Las pruebas diagnosticas confirman que el jugador sufre una rotura del ligamento cruzado anterior con afección del menisco externo. El futbolista se someterá próximamente a una cirugía para solucionar la dolencia y comenzar lo antes posible con su proceso de recuperación. Ramón se encuentra con ánimo y buena predisposición para encarar su rehabilitación. Desde el Málaga CF enviamos a nuestro capitán todo nuestro cariño y apoyo. Tus compañeros, amigos y aficionados esperan con ansia volver a verte disfrutar del fútbol. ¡Volverás con más fuerza, capi!", era el mensaje del club con el diagnóstico.

Desde el primer momento, en el vestuario había la sensación de que era algo grave. Los gestos del jugador y el lenguaje de sus compañeros hacían pensar en lo peor. También las palabras de Sergio Pellicer. "Ramón es la peor noticia. Nos ha dicho en el descanso que pagaría todo su dinero por poder jugar la segunda parte. Podemos perder o ganar, pero darnos cuenta que somos unos privilegiados. Cuando ocurren estas situaciones, estamos pendientes de evolución...", afirmaba el técnico de Nules en la sala de prensa de Almería, pero los ruegos de compañeros, técnicos y aficionados no sirvieron y el diagnóstico es terrible. La noticia ha impactado en el vestuario malaguista, es un jugador muy querido en el vestuario. Aún con 23 años, el fútbol no ha sido justo con su calidad futbolística del que es el capitán del equipo. El club le ha arropado en este proceso de continuas lesiones y le renovó el contrato hasta junio de 2026.

El centro del campo, pues, se queda ahora sin Ramón y Manu Molina, que estará un mes de baja por una lesión menos grave. Además, Luismi está sancionado, así que Izan Merino y Juanpe se perfilan como titulares ante el Cádiz. Aunque es un problema muy menor al lado del impacto que supone desde el punto de vista humano la larga baja de un canterano ejemplar. “Quiero animar a Ramón. Es como mi hermano. Lo ha dicho en el descanso que daba la vida por estar con nosotros. Dar la cara por él porque es una época amarga”, decía Dani Sánchez sobre él en Almería. Es el sentir general en el club con un jugador internacional en las categorías inferiores y al que se veía como un elegido claro desde que llegara en edad alevín desde su pueblo. Desde que debutó con 18 años de la mano de Víctor Sánchez del Amo en el primer partido de la temporada 2019/20, Ramón ha jugado un total de 96 partidos oficiales con el primer equipo (89 en Segunda División, cinco en Primera RFEF y dos de Copa del Rey). La campaña 2020/21 (28 partidos) fue en la que más minutos pudo disfrutar, precisamente con Sergio Pellicer al mando. Ahora le toca otro proceso duro. Hasta ahora, siempre volvió.