La Costa del Sol afronta el retorno de la movilidad a partir de este jueves con 128 hoteles abiertos actualmente y más de 30.000 plazas, con una previsión de apertura paulatina de la planta hotelera a partir de mayo, a lo que se añaden las más de 200.000 plazas de viviendas turísticas disponibles y las segundas residencias de la provincia.

Así, el presidente de Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, ha incidido este miércoles en que esta apertura de la movilidad entre las provincias andaluzas aprobada por la Junta es “una gran noticia” para el destino malagueño, “ya que significa que una parte importante del turismo nacional, el andaluz, pueda venir a toda la provincia”.

Además de poder alojarse en hoteles o viviendas turísticas, ha hecho hincapié en que muchos andaluces “tienen su segunda residencia aquí, casa propia, y que cumpliendo con la responsabilidad de cumplir las medidas contra la Covid-19 no han podido venir y podrán hacerlo ahora”.

Por ello, Salado ha subrayado que dicha apertura significará “una inyección económica importantísima para el consumo, la restauración y para el comercio local”.

Por su parte, el vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, ha señalado en una visita que ha realizado al edificio de Andalucía Lab, situado en Marbella, que la apertura entre provincias “no solamente reactiva el sector turístico, sino que además va a adelantar las aperturas de muchos establecimientos de alojamiento y de hoteles en nuestra comunidad autónoma”.

En este sentido, ha puesto de relieve que la medida supone recuperar “el músculo del sector”, destacando que muchos establecimientos “tenían prevista su apertura para el mes de junio”, la cual “se va a adelantar a mayo”. Ello significa, según Marín, que “muchos trabajadores van a salir del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE )” un mes antes de lo previsto.

“Sin duda, genera unas expectativas y una ilusión que nos hacía falta a todos los andaluces, y especialmente a todos los empresarios y a todos los trabajadores del sector turístico”, ha valorado el responsable andaluz respecto a la apertura interna de la comunidad, al tiempo que ha subrayado que “el alojamiento, la estancia y la pernoctación son claves para tener un turismo que realmente pueda generar esa riqueza y ese empleo” en Andalucía.

Marín ha señalado que “se están reactivando las reservas”, ya que el anuncio “ha provocado un adelanto en la fecha de apertura de los establecimientos”, asegurando que supondrá “estar mejor preparados para que en junio, julio y agosto se cumplan esas previsiones de crecimiento por encima del 50% respecto a 2020”.

El presidente de la Asociación de Hoteleros de la Costa del Sol, José Luque, ha apuntado que “los hoteleros de Málaga estamos muy contentos con la terminación del cierre perimetral de las provincias”, lo que permitirá que “los andaluces que son clientes de nuestros hoteles puedan venir a las costas” o disfrutar del turismo de interior “sin límites de circulación dentro de las provincias”. Además, el colectivo espera que el cierre perimetral de Andalucía “termine pronto”.

Por otro lado, ha mostrado el “deseo” de que la región baje la tasa incidencia de Covid-19, destacando que “el objetivo debe ser el llegar cuanto antes a estar por debajo de los 50 contagios por cada 100.000 habitantes porque es el número mágico que van a mirar todos nuestros visitantes extranjeros para tener autorización y libre circulación para venir a Andalucía a pasar sus vacaciones de verano”.

El presidente de la Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos) y de la Federación de Empresarios de Hostelería de Andalucía, Javier Frutos, ha destacado como “primordial” el que “cada vez se vayan abriendo más los horarios de estos establecimientos”.

El empresario ha enfatizado que en las zonas turísticas, las más afectadas por el cierre provincial, esta medida de apertura para las segundas residencias o para el libre movimiento de los andaluces “es positiva”.

También se ha aprobado la posibilidad de estar en los bares y restaurantes hasta las 23.00 horas, siempre que el cliente cumpla con el toque de queda y esté a esa misma hora en casa. Al respecto, ha valorado que pese a darse media hora de más al cierre de establecimientos, esto es “igualarlo al toque de queda”, por lo que ha estimado que se quedarán “exactamente igual”.

En este punto, ha indicado que el toque de queda se debería haber ampliado hasta las 00.00 horas "y esa media de hora más la hubiéramos aceptado de otro grado".