Alquilar un piso en agosto en primera línea de playa puede costar hasta 3.000 euros a la semana en zonas como Puerto Banús, en Marbella, en la playa cántabra de Portio y en el pequeño municipio mallorquín de Santanyí, que encabezan la lista de municipios con las rentas vacacionales más altas de toda España.

Según datos del grupo inmobiliario Tecnitasa, los precios del alquiler veraniego han subido algo menos de 40 euros de media este año en España, pasando de los 1.016 euros del año pasado a los 1.055 que habrá que desembolsar por cada semana este 2023.

Por comunidades autónomas, donde más aumentan los precios es en Baleares y Canarias, que duplican la media nacional, mientras que en otras zonas como Andalucía, Asturias o la Comunidad Valenciana los alquileres suben en agosto entre un 3 y un 6 %.

La oferta española, explica Tecnitasa, es muy variada en su amplio litoral, como también lo son los precios, que oscilan entre los 350 euros semanales que puede costar un piso en Vicedo (Lugo) a los 3.000 euros de Baleares o la Costa del Sol.

En la costa andaluza, las rentas más altas se encuentran en Puerto Banús (Marbella), donde una vivienda de 100 metros cuadrados puede costar estos 3.000 euros por semana. No obstante, si se busca en el casco urbano, el puerto deportivo o Fontanilla, se pueden encontrar pisos por 1.900 euros semanales por una superficie muy parecida.

En la provincia de Cádiz, en áreas como La Marina de Sotogrande o en el Puerto de Santa María, conseguir una buena estancia cuesta más de 1.500 euros por semana.

Los alquileres más baratos de Andalucía se encuentran en el municipio de Almería, con un coste de 650 euros por semana en primera línea de playa.

En la lista de áreas más caras, Baleares no se queda atrás. En la zona de Portocolm, en Santanyí (Mallorca), un piso junto al mar puede costar también 3.000 euros por semana, mientras que en Pollensa (Mallorca) se puede conseguir un chalé por unos 200 euros menos, al igual que en el puerto de Ibiza, donde alquilar un piso de unos cien metros cuesta unos 2.900 euros a la semana.

"Para esta temporada de verano de 2023 se constata una mayor antelación en la contratación de los alquileres de viviendas a pie de playa, dada la alta demanda existente", explica el presidente de Tecnitasa, José María Basáñez.

El directivo señala que muchos veraneantes "cierran con más de seis meses de antelación, o incluso más tiempo, la contratación del alquiler de verano para evitarse sorpresas de última hora en el disfrute de sus vacaciones en la playa".