La Hermandad del Huerto de Ronda decidió hacer estación de penitencia en las calles de la ciudad a pesar de las previsiones meteorológicas que apuntaban a la posibilidad de que lloviese de forma tímida durante el recorrido. Tras la reunión de la junta de gobierno se decidió realizar la salida ya que las previsiones apuntaban a una tregua hasta la madrugada.

Una salida muy compleja en la que los costaleros tienen que salvar una puerta que apenas deja un centímetro por cada uno de los lados y es necesario bajar el paso. Una imagen que se vuelve a repetir con el paso de María Santísima Consuelo de las Tristezas. En su caso los costaleros tienen que llevar hasta el suelo a su paso para completar una maniobra muy compleja llena de emoción y que fue recompensada con un cerrado aplauso.

Salida de la iglesia de Santa Cecilia de Nuestro Señor Orando en el Huerto.

Tras la salida la hermandad continuó su camino hacia la tribuna oficial acompañada en algunos momentos por una fina lluvia, aunque a su paso se intensificaron las precipitaciones y decidieron acortar su recorrido y volver a su templo.

Mientras tanto, por la mañana celebró un emotivo acto en la iglesia de Santa Cecilia en el que se encendieron cuatro velas de la candelería del paso de María Santísima Consuelo de las Tristezas para recordar a las personas que luchan contra el cáncer, donantes de órganos y pedir por la paz en el mundo.

Para ello se contó con representantes de la Asociación Española Contra el Cáncer y una mujer que está en tratamiento y que es hermana de la cofradía, una donante de órganos, una familia ucraniana que está refugiada en Ronda y al hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de la Paz. Ellos fueron los encargados de prender las velas con las que procesionó esta imagen esta noche por las calles rondeñas. Además, dos de las velas llevaban la palabra paz impresa con los colores de la bandera de Ucrania.