El juzgado de Instrucción número 3 de Torremolinos, en Málaga, ha decretado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del joven de 21 años que intentó asesinar a su exnovia, de 17, el pasado martes, 28 de marzo.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, se le atribuyen los delitos de tentativa de asesinato, allanamiento de morada y quebrantamiento de condena, al saltarse la orden de alejamiento que tenía hacia la víctima.

Los hechos tuvieron lugar en torno a las 15:00 horas del 28 de marzo en Torremolinos cuando una joven saltó desde el segundo piso de una urbanización de pisos.

Según la versión de la presunta víctima estaba huyendo de su expareja que la perseguía con un hacha en la mano mientras la amenazaba. El agresor había entrado por la ventana de la vivienda, en un segundo piso, donde se ocultó hasta que ella llegó.

La chica, de solo 17 años, pudo salvarse gracias a que saltó por la ventana y el toldo del piso de abajo estaba echado, lo que le amortiguó la caída. Después de eso fue trasladada al Hospital Clínico con heridas y contusiones leves, en el que fue ingresada.

También ingresaron, en otro hospital para proteger a la chica, al presunto agresor porque tras los hechos se auto infligió varios cortes y al verse acorralado por la Policía huyó saltando una valla de la urbanización y emprendió una carrera campo a través en la que los agentes lograron alcanzarlo y detenerlo. En el hospital estuvo custodiado por los agentes hasta que recibió el alta y fue trasladado a los calabozos.

La investigación del caso ha desvelado que el arrestado, que se ha acogido a su derecho a no declarar ante la magistrada del juzgado, escaló por la fachada del edificio hasta la segunda planta y accedió por una ventana a la vivienda de su exnovia.

Allí esperó, con la cara oculta tras una mascarilla, hasta que la víctima volviera del instituto. Lo hizo sobre las tres de la tarde y, según relató ella, cuando entró al piso el hombre “de forma sorpresiva” la atacó con un hacha, causándole heridas de gravedad, “entre ellas golpes y cortes en el cráneo y en algunos tendones de su mano”, según han explicado fuentes del TSJA. 

A pesar de tratarse de su expareja la adolescente ha afirmado que en ningún momento pudo reconocer a su atacante porque no le dio tiempo a levantar la cabeza cuando recibió el primer golpe y pensó que la única opción para salvarse era saltar por la ventana. Actualmente la víctima sigue recuperándose del ataque.

En un primer momento la chica creyó que quien la había agredido había sido un ladrón pero al ver las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona que le mostró la Policía pudo reconocer a su exnovio.

Junto a ella declararon otras tres personas que presenciaron cómo la chica saltaba por la ventana y después, el agresor, corría huyendo por el campo.

Su ingreso en prisión fue solicitado tanto por la Fiscalía como por la acusación particular, ejercida por la víctima. La jueza encargada del caso también ha ordenado que el detenido sea ingresado en un módulo psiquiátrico donde pueda ser valorado y, en caso de ser necesario, recibir tratamiento. 

Condena previa por violencia de género

Esta no era la primera vez que el chico había acechado a la menor. El chico tenía una orden de alejamiento en vigor dictada por el mismo juzgado de Violencia de Género número 3 de Torremolinos a finales del pasado mes de diciembre.

Según se consideró probado entonces, ambos habían mantenido una relación sentimental de casi dos años que ella rompió a finales del pasado verano, hecho que él no aceptó. La llamó en varias ocasiones para que volviera con él y tras ello causó desperfectos en el coche los padres de su expareja.

El joven fue condenado entonces por un delito de coacciones leves en el ámbito de la violencia de género y además de una orden de alejamiento durante ocho meses, se le impusieron 40 días de trabajo en beneficio de la comunidad y una indemnización de algo más de 600 euros por los daños al vehículo. 

El teléfono 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 52 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es. También se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016 y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.

Ninguno de los teléfonos deja rastro en las facturas aunque sí es necesario que se borre el registro de la llamada desde el móvil o el correo. Atienden a todas aquellas personas que crean que pueden estar sufriendo este tipo de violencia o que necesiten asesoramiento porque no están muy seguras de ello.