El bar Toto, situado en la Plaza de las Carmelitas, en Vélez-Málaga, ha sido por décadas un punto de encuentro y referencia en la vida social de la ciudad. Sin embargo, tras 28 años bajo el arrendamiento de sus anteriores propietarios, el establecimiento ha quedado sin ocupación, cumpliendo con los términos legales establecidos en el contrato de arrendamiento y la legislación vigente.

Ante este panorama, el Ayuntamiento de Vélez-Málaga ha dado inicio al proceso para la concesión administrativa del mencionado bar. El concejal de Patrimonio, Manuel Gutiérrez, ha brindado los detalles sobre este proceso, delineando los pasos a seguir para obtener la concesión y reactivar este espacio de importancia para la vida local.

El proceso, según ha explicado el edil, comienza con la incoación del expediente para la explotación del establecimiento por parte de la Concejalía de Patrimonio. Una vez completado este paso, el pliego de condiciones será sometido a la aprobación de diversas delegaciones del Ayuntamiento, culminando en su aprobación final. Se estima que todo este proceso llevará alrededor de un mes.

En términos financieros, se ha revelado que la concesión del bar Toto tendrá una duración mínima de 15 años, con la posibilidad de extenderse hasta 20 años mediante una prórroga adicional de cinco años. La valoración de esta concesión se cifra en aproximadamente 315.000 euros, lo que sugiere que el canon de arrendamiento podría rondar los 1.600 euros. Además, se estima que se necesitará una inversión mínima de unos 70.000 euros para adecuar el establecimiento a los estándares requeridos, según los informes técnicos disponibles.

Es importante destacar que estos datos son provisionales y podrían ajustarse en el transcurso del proceso. Sin embargo, ofrecen una visión clara de los pasos a seguir y los costos involucrados en la obtención de la concesión del bar Toto.

En última instancia, Gutiérrez ha subrayado la transparencia del proceso y ha extendido una invitación a todos los interesados a seguir de cerca su desarrollo, ya que "este establecimiento representa no solo un negocio, sino también un punto de encuentro y tradición en la vida de la comunidad veleña".