El Hexa Aldemar se encuentra ya listo para conseguir el ascenso a División de Honor B ante el Naranco de Oviedo, conjunto al que los de Juanjo Fernández deberán ganar en dos partidos, ida y vuelta, el primero de los cuales se celebrará hoy (17:00, Pabellón del Colegio Hermanos Maristas).

Los malagueños, que no consiguieron el ascenso automático en la eliminatoria celebrada hace dos semanas, deberán luchar ahora con este equipo, en zona de descenso de la categoría de plata del balonmano nacional, para ocupar su lugar.

El malagueño Dani Alcedo, uno de los pesos pesados en la plantilla del Hexa, dijo ayer confiar "en que la motivación y la ilusión con la que afrontamos estos partidos, superen al cansancio y la fatiga que ya acumulamos". "La verdad es que estamos muy justitos, pero confío en mis compañeros y en el ambiente que se vivirá en Maristas para superar este primer choque", afirmó Alcedo.