Los minutos se cotizan caros en el Unicaja. Sólo Hettsheimeir está de baja, aunque su reaparición se antoja inminente. Esta semana se puede acelerar su integración después de que ya la pasada hiciera algunos tramos de trabajo. En la composición original de la plantilla había sobrecarga en la posición de escolta, con Toolson, Dragic, Urtasun y Sergi Vidal con esa posición como la predilecta aunque algunos de ellos hubiera jugado de uno o de tres puntualmente. A tenor de lo visto en los últimos partidos, a Vidal le toca reciclarse en la posición de base para tener minutos. Fue curioso comprobar cómo ante el Manresa el badalonés fue el jugador que más tiempo se desenvolvió en la posición de base, con 14 minutos, por los 13 de Granger y los 12 de Calloway.

Más allá de descargar de minutos al uruguayo, uno de los jugadores con más achaques físicos a lo largo de la temporada, estaba la idea de que Vidal acumulara minutos de rodaje en la posición para cubrir posteriores contingencias que pudieran surgir más adelante. Como sucedió, por ejemplo, poco antes de la Copa del Rey, cuando un esguince de tobillo de Calloway hizo que se perdiera un tramo esencial de la temporada. Y entonces la opción de Vidal no estaba tan trabajada. Así lo confesó Joan Plaza tras el partido. De alguna manera, Sergi Vidal es ahora el tercer base de la plantilla. La semana previa no había tenido minutos ante el Obradoiro y el sábado sí los tuvo ante el Manresa.

De alguna manera este tramo de temporada está sirviendo para dar minutos a quienes menos horas de vuelo esta temporada tienen y al mismo tiempo descargar a los más castigados. Pero en ese frágil equilibrio que son los estados de forma tampoco se le puede quitar demasiados minutos a los habituales. Sí parece que Vidal, cuya continuidad para el año que viene parece complicada, tiene ahora una posición en la que rascar minutos.