Javi Gracia tiene a tiro un doblete legendario

El Real Madrid reparte sus cinco sentidos en un objetivo bifronte: ganar todos los puntos posibles en Liga para desbancar al Barcelona del liderato y avanzar rondas en la Champions para reeditar el título del considerado mejor torneo de clubes. Un esfuerzo titánico al que está obligado todos los años. En Málaga cada temporada hay un anhelo que se repite: conseguir la primera victoria de la historia en el Santiago Bernabéu. Con mejores y peores plantillas se ha rozado y se ha estado muy lejos, pero nunca hubo premio. Ahora recoge el testigo del sueño Javi Gracia, quien además tiene en su mano la posibilidad de hacerlo más legendario aún, puesto que ganar en Chamartín sería un doblete de un listón incomparable, haber ganado en la misma temporada en el estadio de los dos mejores clubes de España.

La empresa es harto complicada, más aún con el conjunto de Carlo Ancelotti de nuevo enganchado al título tras el empate del Barcelona en Sevilla, que lo dejó a solo dos puntos del liderato. Pero también lo era conquistar el Camp Nou ante un conjunto azulgrana en plena racha intratable. De hecho, ahí sigue reluciendo la épica blanquiazul: de los últimos 20 partidos, los de Luis Enrique han ganado 18, empatado uno y perdido sólo el que se llevaron los malaguistas con el tempranero tanto de Juanmi. Si se obró ese milagro, por qué no otro este sábado a partir de las 20:00.

Incluso la era reciente contempla varios partidos en los que el equipo blanquiazul estuvo a punto de desvirgarse en Chamartín. La temporada 11/12, por duplicado. En partido de Copa del Rey, con el morbo extra de Pellegrini enfrentándose a Mourinho, los blanquiazules llegaron a ponerse 0-2 en el marcador en la primera mitad, aunque luego los blancos voltearon el resultado (3-2). Dos meses más tarde, el famoso cazorlazo en un tiro de falta del asturiano permitió arrancar un empate con el Real Madrid jugándose la Liga. Para el recuerdo quedan también sendos 4-3, uno con Joaquín Peiró en el banquillo y otro de Antonio Tapia. En el primero, un partidazo blanquiazul le valió para ganarse el cariño de todo el país por su fútbol estético y valiente; en el más reciente hubo que luchar contra Higuaín, quien hizo un póquer de goles, y un desastroso arbitraje por parte de Iturralde González.

A Bernd Schuster no le fue tan mal en cuanto a lo que se esperaba. El Málaga cayó 2-0 en un partido que no dejó ninguna secuela. Javi Gracia ya cuenta con el precedente de la ida, con los blancos en absoluta racha triunfal y pasando apuros hasta el pitido final (1-2). Vistos los problemas para jugar a domicilio ante equipos de la parte baja de la tabla y la capacidad de los jugadores para venirse arriba ante los más punteros de la competición, hay cierto optimismo dentro de la tremenda dificultad que encierra saquear el Bernabéu. Otro motivo para la esperanza es que el partido se encuentro justo en medio de la eliminatoria de Champions con el Atlético de Madrid, si bien las bajas de Weligton y Camacho son un serio handicap.