Después de un mes de agonía, por fin una victoria del Hexa Aldemar. El conjunto colegial rompió ayer su racha negativa a costa de un equipo, el Obearagon Huesca, que plagado de grandes nombres no fue rival para los pupilos de Juanjo Fernández. El equipo de Maristas se apoyó siempre en una excelente defensa y en la aportación de Zuburia bajo palos, lo que se tradujo en incapacidad ofensiva de los oscenses, que echaron mano de los siete metros para anotar su primer tanto en el minuto ocho.

Era un festival de los locales. De la Sierra y Joaquín con su lanzamiento a distancia, Román desde el extremo y el trabajo defensivo en tres líneas servía para superar a un rival con muchos más centímetros que no supo en ningún momento anular el sistema planteado por el técnico estudiantil.

No obstante, un pequeño bache en los instantes finales de la primera mitad privó al Hexa llegar al descanso con el encuentro prácticamente sentenciado, después de haber logrado una renta de hasta siete goles (15-12).

Tras el paréntesis, el Huesca reaccionó tímidamente, pero lo malagueños detuvieron sus arreones con seriedad defensiva. A partir de ahí, los malagueños comenzaron a arrasar a los visitantes, lo que provocó un ambiente festivo en la afición a cinco minutos para la conclusión (28-20). Con esta victoria, regresa la tranquilidad al club malagueño, que empieza a ver la luz en el aspecto deportivo.