El Teucro sigue con paso firme su camino hacia la permanencia. El conjunto pontevedrés derrotó con claridad al Antequera, un rival directo, (29-23) y ahondó en la crisis del conjunto malagueño, que queda en una situación complicada en la tabla clasificatoria.

Los dos equipos se jugaban mucho en el choque, el Teucro necesitaba la victoria para escapar de la zona de descenso y el Antequera para no alargar su crisis de resultados. Esa necesidad de puntuar la acusaron ambos equipos en su juego.

El Teucro logró la primera ventaja de dos goles (3-1, al minuto 6), pero el Antequera consiguió, con ataques muy largos que casi siempre finalizaban en la línea de seis metros, darle la vuelta al marcador con un parcial de 2-6.

El conjunto local pasaba por problemas, aunque el cuadro malagueño, que gozó durante ese momento de una superioridad numérica, no supo aprovecharlo para aumentar su ventaja en el electrónico. Entonces, surgió en el conjunto gallego figura del portero Radivoje Ristanovic. El serbio mantuvo a su equipo en el partido con un recital de paradas, pese a los numerosos errores de sus compañeros en el ataque posicional.

El partido entró en una fase de continuo intercambio de goles hasta que el Antequera, a falta de cinco minutos para el descanso, acrecentó sus problemas con un atasco monumental en ataque que el Teucro explotó con un parcial 3-0.

En la reanudación, el conjunto visitante no logró mejorar sus porcentajes de lanzamientos. En un visto y no visto, el equipo local tuvo una renta de 6 goles en el marcador, que obligó a Ortega a parar el choque con un tiempo muerto. Tras ese parón, el Antequera, gracias a las paradas de Jorge Martínez, bajó la desventaja hasta los cuatro goles (22-18). Pero fue un espejismo. Esta vez, el Teucro, habituado a sufrir hasta el final en sus partidos de casa, no dio muestras de debilidad y volvió a dispararse en el marcador.