La acampada de los indignados en la Plaza de la Constitución de la capital se levantará definitivamente el próximo lunes, día 20, según ratificaron ayer portavoces del movimiento 15-M. No obstante, este colectivo destacó que seguirá habiendo actuaciones en la plaza, así como en los barrios, un punto de información y se organizarán asambleas los miércoles y los domingos. Los representantes de esta asociación pondrán fin así, un mes después, a la instalación creada en la plaza más céntrica de la capital, en la que se han desarrollado todo tipo de actos culturales y sociales y en la que se llegó a congregar a miles de personas el pasado 20 de mayo. Durante este periodo, en torno a medio centenar de personas han pernoctado en la vía, despertando las críticas de los vecinos, que incluso llegaron a poner denuncias en comisaría por los ruidos y la suciedad generada. "El lunes vamos a dejar la plaza como los chorros del oro", decía ayer uno de los miembros del 15-M. 

Un día antes, el domingo 19, este colectivo ha convocado una manifestación a las 19:00 que arrancará en el Ayuntamiento y que finalizará en la misma Plaza de la Constitución. Se prevé la asistencia de personas de todos los barrios y del resto de municipios de la provincia. La principal causa de esta protesta, que se desarrollará a la vez en 60 ciudades españolas y varias europeas, será mostrar la disconformidad ciudadana con el llamado pacto del euro, es decir, la política de estabilidad monetaria que está discutiendo la UE. 

Portavoces del 15-M subrayan que "el pacto del euro va a llevar a un empobrecimiento de la clase trabajadora a corto plazo y solo prioriza las necesidades de la banca y las grandes empresas". En su opinión, ese pacto "es la gota que colma el vaso" y denuncian que los políticos están adoptando medidas "que no aparecían en sus programas electorales por lo que se está produciendo un atentado a la democracia". Estas medidas, según denuncian, "afectarán especialmente a España, Grecia, Portugal e Irlanda y suponen un golpe de efecto de las grandes economías europeas como Francia o Alemania para garantizarse la devolución de los préstamos que nos han concedido". 

Los indignados creen que esa supuesta estabilidad de la moneda única europea sólo trae consigo "más recortes, la bajada de sueldos o la privatización de los servicios públicos" y consideran que solo mejorará la actividad económica "a muy largo plazo, por lo menos 10 años". 

Otro tema estrella del que se habló ayer en la acampada fue el de los actos violentos ocurridos el miércoles en la puerta del Parlamento de Cataluña, que provocaron enfrentamientos entre manifestantes y policía y varios heridos. Los indignados en Málaga se desligaron ayer de cualquier acto violento porque "somos un movimiento pacífico y cualquiera que produzca altercados no nos representa". En este sentido,mostraron cierta preocupación porque "parece que ahora cualquier disturbio que ocurre se le achaca al 15-M". El último tuvo lugar esta misma semana cuando un grupo de seguidores del 15-M abuchearon a la ex ministra Carmen Calvo y a la baronesa Thyssen cuando ambas acudían a una fiesta privada tras la inauguración de la primera exposición temporal del museo Thyssen.