Júzcar seguirá siendo pueblo pitufo. Así lo decidieron ayer sus vecinos y los propietarios de viviendas en este municipio de la Serranía de Ronda, que por una abrumadora mayoría decidieron que sus paredes sigan estando pintadas de azul. De momento, el blanco no volverá, aunque la decisión adoptada en el sondeo celebrado ayer no es definitiva y si en el futuro se detecta rechazo podrá ver revocada. De los 250 vecinos con derecho a voto 141 votaron por el azul, 33 se decantaron por el blanco, seis votos fueron en blanco y cuatro se declararon nulos. El resultado fue claro y el alcalde del municipio, David Fernández, se mostraba satisfecho por el mismo. Es consciente de que el azul ha generado un movimiento económico y turístico que nunca hubiesen imaginado antes. De este modo, la iniciativa de la multinacional Sony Picture para lanzar una campaña de marketing para su película Los Pitufos en 3D se ha convertido en una ocasión de negocio para muchos juzcareños.

Además, el resultado del sondeo abrirá nuevas oportunidades para la localidad. Y es que había varios emprendedores pendientes del resultado del mismo para decidirse por esta localidad para implantar nuevos proyecto. Entre ellos destaca la realización de teatralizaciones, la construcción de un nuevo hotel rural y hasta un pequeño parque temático. Y todo ello relacionado con el mundo de los pitufos.

Los vecinos en su gran mayoría son conscientes de los beneficios económicos que le está reportando ser el único pueblo pitufo del mundo, al tiempo que el ingenio se va agudizando con el paso del tiempo. Recuerdos, pitufo aventuras, menús inspirados en los pitufos o la propia cueva de Gargamel se han ido sumando el pequeño mundo azul que envuelve a Júzcar.

No obstante, ayer los más inquietos eran los propios pitufos, que desde hace meses se sienten seguros y no dudan en pasear por las calles de este pueblo y compartir su vida con los miles de visitantes que se acercan a verles. De hecho, Papá Pitufo y Pitufina no duraron ayer en hacer su propia campaña a favor del azul y en contra del blanco. "No queremos tenernos que ponernos a buscar ahora otro lugar para vivir", decía Papa Pitufo, haciendo un alarde de humor al recordar que "con la crisis sería muy complicado poder construir nuevas casas". Estos personajes figurados, que son representados por los propios vecinos lo tenían claro desde el principio. "Ha sido una iniciativa muy buena para el pueblo y esperemos que dure mucho tiempo", decían.