El gerente del Carlos Haya renuncia tras 15 años de gestión y trabajará en la UCI

Los más de 5.000 trabajadores del Hospital Carlos Haya, el principal centro de trabajo de la provincia, repartían ayer sus comentarios entre la indignación por los recortes de la Junta de Andalucía y la sorpresa por la renuncia del gerente. Antonio Pérez Rielo comunicó ayer a una treintena de directores de unidades de gestión clínica que dejaba la gerencia, una decisión con la que cierra 15 años como gestor en los tres hospitales más importantes de la provincia: el Costa del Sol de Marbella (1997-2004), el Clínico (2004-2008) y el Carlos Haya (2008 hasta ayer).

Pérez Rielo asegura que su renuncia obedece a razones "estrictamente personales". Otras fuentes, en cambio, achacan su marcha a supuestas desavenencias con el gerente del Servicio Andaluz de Salud, José Luis Gutiérrez. Pérez Rielo lo niega y asegura que no tiene diferencias con las líneas estratégicas marcadas por la dirección del SAS. Las fuentes sostienen que el hasta ayer gerente del Carlos Haya deja la gestión porque habría perdido la confianza política de quienes lo nombraron.

En cuestión de días, este médico -que lleva 35 años en el SAS, que se especializó como intensivista en la Unidad de Cuidados Intensivos del Carlos Haya, que fue jefe de Urgencias (1993-1996) y director médico (1997) del centro sanitario- volverá a la UCI. Tiene su plaza como adjunto de esa unidad. El Carlos Haya ha marcado su vida. Llegó a este hospital en 1977 para hacer la residencia y ya nunca se fue de la provincia. En el hospital malagueño ejerció su profesión durante 20 años y también allí dio sus primeros pasos como gestor, en la dirección médica. De forma provisional, le sustituirá como gerente en funciones el director médico del complejo, Miguel Ángel Prieto.

Pérez Rielo llegó como gerente al Carlos Haya hace cuatro años. Aunque él decía entonces que no era un apagafuegos, lo cierto es que fue designado para sustituir a María Ángeles Prieto, cuya gestión se caracterizó por la sucesión de conflictos. Venía del Clínico, donde estuvo cuatro años y logró dar estabilidad a un centro sanitario que hasta entonces se caracterizaba porque casi ningún gerente le duraba más de un año. En ese hospital, impulsó la reforma integral del edificio, multiplicó la investigación y colocó a muchos de sus servicios como punteros en Andalucía.

Tiene fama de duro, de negociador hábil y de peleón por los centros que le ha tocado dirigir. Fiel a esta última característica, apoyaba el proyecto de un gran hospital para sustituir al actual Carlos Haya porque entendía que la dispersión del centro en cuatro pabellones generaba duplicidades y disfunciones en el trabajo diario. Pero se va no solo sin que se haya puesto un ladrillo del megahospital, sino con el proyecto herido de muerte por mor de los recortes. "Han concurrido una serie de circunstancias en la que no solo la comunidad autónoma tiene problemas financieros para hacer inversiones sino que en general en casi todas las comunidades hay un parón en las inversiones. Quizás haya que buscar otro momento u otras soluciones", dice.

Nació en Luarca y es de esos asturianos militantes que llevan el Asturias, patria querida en el móvil. Ayer sorprendió a los directores de unidad de gestión con su renuncia. La mayoría creía que los convocaba en el Hospital Civil para decirles cómo tenían que encajar los recortes anunciados por la Junta. Pero les dijo que se iba. Hoy se lo comunicará a la junta de personal, aunque los sindicatos ya lo saben por la prensa, algo que no les sentó nada bien. Aunque el verdadero malestar, insistían, era ayer con los recortes de la Junta, "una patada para los bolsillos de los trabajadores".