Málaga

Los 15 acusados de atacar a 'skinheads' niegan que participaran en la pelea

  • Los jóvenes rechazan haber formado parte de una banda de 'redskins' que se concertó para agredir a seis cabezas rapadas que hacían 'botellón' en el Paseo de los Curas

Quince jóvenes de alrededor de 20 años de edad son juzgados por la Audiencia de Málaga por formar parte de los redskins, un grupo de ideología radical de izquierdas, acusados de concertarse para atacar el 8 de marzo de 2009 a varios skinheads, de ideario nazi, que hacían un botellón en el Paseo de los Curas. Los imputados se enfrentan a penas que oscilan entre los seis y siete años de cárcel por presunta asociación ilícita, lesiones y faltas de lesiones, daños y maltrato.

Los jóvenes (dos universitarios, varios estudiantes de cocina en aquellas fechas y otros ahora parados pero entonces empleados en puestos no cualificados) expresaron ante el tribunal una versión prácticamente unánime: ninguno ha reconocido que aquella noche estuviera en el Paseo de los Curas o que agrediera a las víctimas. Es más, ninguno se ha confesado seguidor de los redskins. A lo sumo han admitido que conocían la tendencia musical y algunos han dado muestras de una vaga tendencia política al responder, a preguntas de la Fiscalía, que ocasionalmente había acudido a manifestaciones "normales" del 1 de Mayo, contra la Guerra en Iraq o estudiantiles. Un acusado incluso apuntó que antes acudía esporádicamente a manifestaciones, pero que ahora participa con más frecuencia "porque hay más motivos para ir".

El supuesto líder de este grupo rash, Juan José N., indicó que aquella noche estuvo en su domicilio sin impartir ninguna indicación ni mensaje a nadie para que acudiera al Paseo de los Curas. Agregó que hacia la 1:30 de la madrugada envió desde su ordenador un correo electrónico a una amiga y que estuvo conectado hasta las tres de la mañana, circunstancias que, según su declaración, han quedado acreditadas notarialmente.

El supuesto colíder del grupo, Tomás R., precisó que aquella noche estuvo en La Ceiba (un local germen de lo que luego ha sido La Casa Invisible) con un amiga y después en otro bar llamado Búnker. Además justificó que tuviera en su domicilio determinados pasquines, pegatinas y documentos relacionados con el movimiento redskin que la Policía encontró durante un registro. Afirmó que se los habían entregado al comprar música "en un puestecillo" y que otros documentos titulados Asesinados por el fascismo eran un trabajo universitario. El hecho de que cuatro personas le reconocieran como partícipe en la trifulca del Paseo de los Curas lo equiparó con la detención de un tal Johnatan que también fue identificado en su momento como un partícipe en la pelea pese a que estaba en prisión. Los 15 acusados fueron detenidos días después de los incidentes gracias a la identificación de las víctimas.

El escrito de acusación provisional de la Fiscalía afirma que aquella noche "en unidad de acción y propósito" acudieron al Paseo de los Curas porque sabían que allí estaba de botellón el grupo de cabezas rapadas, a los que atacaron "de manera violenta" con "puños americanos, defensas extensibles, bates de béisbol, hachas y cuchillos". Dos de las víctimas precisaron tratamiento quirúrgico y tardaron en curarse una semana, mientras que los cuatro restantes no requirieron asistencia médica. La Fiscalía exige para los dos supuestos líderes de la banda siete años de cárcel por un delito de asociación ilícita y otro de lesiones. Para otros 12 exige por los mismos delitos seis años de cárcel, petición que eleva a siete en el caso de Juan Francisco F.

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