El curso que comienza el próximo lunes 15 de septiembre no será para todos igual. Mientras miles de alumnos dispondrán de colegios nuevos o clases renovadas, otros tendrán que aprender en módulos prefabricados. Según denunció ayer el responsable de Educación en el Partido Popular, Francisco Oblaré, 2.235 niños malagueños iniciarán este curso escolar 2008/09 en 87 aulas prefabricadas repartidas en 20 municipios de la provincia. Una cifra que supone casi el doble que en el 2004/05, cuando eran 1.300 alumnos. "Es una barbaridad", afirmó Oblaré.

Municipios como Marbella, Sierra de Yeguas, Rincón de la Victoria, Coín, Torremolinos, Benalmádena y Málaga capital son algunos de los que concentran un mayor número de aulas, que también podrían extenderse al colegio de Cartaojal, en Antequera.

La consejera de Educación, Teresa Jiménez, señaló ayer que en toda Andalucía habrá 241 centros escolares con aulas prefabricadas en el inminente curso. Jiménez explicó que estas instalaciones "se usan en función de la necesidad", ya que son espacios transitorios que suponen "el mejor indicador" de la voluntad de mejora. La titular de Educación detalló que en el 87% de esos centros se mantendrán las aulas prefabricadas debido a la continuidad de las obras y en el 13% restante permanecerán por necesidad escolar o porque los equipos directivos han pedido que no se retiren para usarlas como complemento a los espacios docentes. La consejera dijo que estos espacios "cumplen todos los requisitos y no suponen merma alguna".

Sin embargo, no todos lo ven de la misma manera. El ejemplo más evidente es el del colegio Gregorio Marañón, en La Cala del Moral, donde la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) denunció ayer la "precaria situación" de las dos aulas prefabricadas instaladas en los aparcamientos del centro educativo. Allí iniciarán su vida escolar alrededor de medio centenar de pequeños de tres años, pero el material y mobiliario del que dispondrán aún está embalado en cajas. La presidenta del AMPA, Keka González, aseguró que los módulos tienen además muchas deficiencias: "No tienen ventilación, hay cristales rotos y zonas puntiagudas, los baños son para Primaria y los niños de Infantil no pueden usarlos, apenas tienen luz porque las ventanas dan a un muro que encima se está moviendo y los caños de desagüe dan también a esas ventanas", según enumeró ayer la responsable de la asociación. "No entiendo cómo se consiente que los pequeños den clase en auténticas ratoneras", añadió María, una de las madres del colegio, que añade que allí siguen sin plan de evacuación y que las prefabricadas están ubicadas justo por donde deberían pasar los vehículos de emergencia.