Profesores de la Facultad de Ciencias se han dirigido por escrito al rector, José Ángel Narváez, para expresar su malestar por la inclusión del seminario La enfermedad: ¿enemiga o aliada? en los Cursos de Verano de la Universidad de Málaga (UMA). El programa aborda las denominadas medicinas alternativas: homeopatía, bioneuroemoción o la medicina antropofósica, todas consideradas pseudociencias por la ausencia de demostración científica de sus postulados. El escrito también lo han remitido al director de la Fundación General de la Universidad de Málaga, Diego Vera, entidad encargada de organizar el programa de verano.

Enrique Viguera, profesor de genética firmante del escrito y responsable del programa de divulgación Encuentros con la Ciencia, recuerda que "ningún estudio científico ha probado la eficacia de las llamadas terapias alternativas. Si funcionaran ya las habría incorporado la medicina tradicional. Detrás de cada fármaco hay numerosos investigadores que llevan años realizando estrictos protocolos de control para descartar posibles efectos secundarios no deseados".

Argumenta que Encuentros con la Ciencia suma "casi 15 años fomentando el rigor científico y el método científico como base de la investigación" y se pregunta si "la Fundación General, y por ende la Universidad de Málaga, va a dar credibilidad académica a disciplinas que no tienen base científica. No es cuestión de puntos de vista o de debate académico, la cuestión es que ya han muerto demasiadas personas por el uso de las terapias alternativas".

El director de la Fundación General de la Universidad de Málaga, Diego Vera, ha explicado que en esta edición el sistema elegido para seleccionar los seminarios ha consistido en aceptar todas aquellas propuestas que cumplían los requisitos formales, sin entrar en los contenidos.

Vera argumenta que no se trata de un programa académico formal, sino estival y abierto en el que tienen cabida asuntos "polémicos, frescos y controvertidos". "También se habla de Semana Santa. ", apunta. Subraya que sería "peligroso" que la fundación entrara a decidir los contenidos. "Hoy se podría decir que no a este curso, mañana a otro tema y algún día se llegaría a elegir a las personas. No soy un gobernador civil de franquismo". Afirma que la directora del curso, María del Carmen Álvarez, es una catedrática con un currículum extenso que ya ha organizado más cursos sobre estos asuntos tanto en la UMA como fuera.

El secretario del curso es Pedro Fernández-Llebrez, catedrático de fisiología y director de la Escuela de Posgrado de la UMA.

La catedrática de genética María del Carmen Álvarez alude a las medicinas alternativas no como pseudociencia, sino como medicina minoritaria. Con 40 años de trayectoria afirma que a estas alturas es "muy escéptica" respecto a las "etiquetas". "La ciencia también tiene sus lagunas", indica. "Todo depende de la perspectiva. Las delimitaciones entre lo que es y no es ciencia no son tan claras".

El curso, adelantado ayer por el portal de internet El Observador, está previsto que se celebre en Marbella entre el 18 y el 22 de julio y aborda la medicina "de manera inclusiva y no exclusiva", según María del Carmen Álvarez. Es decir, trata la medicina junto a cuestiones como la bioneuroemoción, o la denominada medicina antropofósica que contempla de forma paralela los conocimientos médicos convencionales con las cuestiones espirituales.

La catedrática confiesa que su visión actual de la ciencia ha cambiado mucho en los 10 ó 20 últimos años. Señala que la medicina trata el cuerpo "por piezas, como si fuera un coche y no un ser humano con muchas otras dimensiones". Precisa que "hay muchos intereses que mueven la medicina e incluso la investigación. No digo que sea en todos los casos, pero sí hay muchos en los que se arrincona por determinados intereses. Hay casos de muertos por la medicación y eso nunca aparece". Además, subraya que en el curso participarán médicos como un jefe de servicio del Hospital Verge de la Cinta (Tortosa) que "siendo médico también practica la medicina integrativa".

El sutil aterrizaje de estas terapias carentes de respaldo científico en las universidades ha sido una cuestión polémica y controvertida en los últimos años. El último episodio lo protagonizó la Universidad de Barcelona que en marzo de este año retiró el máster en homeopatía que impartía desde 2004.