El Metro al centro, a marchas forzadas para llegar a mitad de 2018

El último compromiso temporal asumido por la Junta de Andalucía para que los trenes del Metro alcancen la futura estación Atarazanas a mediados de 2018 pende de un hilo. A pesar del avance ya normalizado de los trabajos del suburbano en el lateral norte de la Alameda Principal, donde los operarios de Acciona y Sando hicieron su entrada hace ahora algo más de un año, el retraso en el impulso final de la obra pendiente en el tajo de El Corte Inglés siembra de dudas la posibilidad objetiva de cumplir con el objetivo de la Consejería de Fomento. Porque sin la pieza del trazado que se extiende desde el intercambiador de El Perchel (junto a Renfe) hasta el puente de Tetuán, la operativa del tramo final es nula.

Es en este punto en el que la urgencia se convierte en protagonista de una cuenta atrás para la que en el mejor de los casos restan del orden de dos años. Las trabas, sin embargo, surgen desde el momento en que la necesaria autorización del Consejo de Gobierno andaluz para proceder a licitar esta parte del recorrido sigue demorándose en el tiempo. Una determinación que se había previsto para junio, no tendrá lugar al menos hasta el próximo mes de septiembre.

De cumplirse esta primera premisa, conforme a los calendarios legalmente establecidos, el periodo de licitación de esta obra, cuyo presupuesto inicial se fija en 22 millones, habrá de mantener la recepción de ofertas durante 52 días. Ello lleva el calendario al menos al mes de noviembre, tras lo que habrá de contar otro mes más o menos para que los técnicos de la Agencia de Obra Pública de Andalucía analice las proposiciones y adopte la adjudicación final. No es desdeñable, por tanto, pensar en que la luz verde final al contrato no se adopte hasta enero o febrero de 2017.

Desde ese momento, restarían unos 18 meses para hacer posible la terminación del tramo Renfe-Guadalmedina, periodo inferior a los 21 meses de plazo de ejecución que forma parte del pliego de condiciones administrativas y técnicas. La previsión, sin embargo, que manejan en el seno de la Administración autonómica es que las ofertas de las empresas interesadas en hacerse con esta obra rebajan de manera sensible este periodo de ejecución.

A modo de ejemplo, el tramo justamente posterior, el que ya se encuentra en proceso de materialización en la Alameda, fue adjudicado a la UTE integrada por Acciona y Sando por 26,6 millones de euros (frente a los 45 millones previstos) y por un plazo de 28 meses, cinco menos de los planteados en la licitación. Incluso en el caso de que las firmas constructoras redujesen el calendario de terminación, el desarrollo de la infraestructura, incluyendo la estación Guadalmedina deberá dar paso al proceso de instalaciones y superestructura, que la Junta dejó en manos de la concesionaria original del proyecto. Una tarea que requerirá de algunos meses más.

Todo ello sitúa en el escenario de la duda la posibilidad real de alcanzar el hito final de alcanzar el centro urbano a mediados de 2018. El paso adelante que ahora pretende dar la Consejería de Fomento se produce una vez resuelto el contrato con la adjudicataria inicial de esta parte del trazado del ferrocarril urbano, Grupo Ortiz. Las discrepancias que vienen manteniendo ambos actores en cuanto al valor real de la intervención, repetidas en varias ocasiones desde que a principios de 2010 arrancaron los trabajos previos en Callejones del Perchel, forzaron a los actuales responsables del departamento regional a negociar con la mercantil la resolución del contrato.

Desde ese momento se abrió un nuevo escenario para la terminación de una obra que acumula ya más de un año de inactividad desde que los operarios de Ortiz abandonaron (de nuevo) el tajo. Conforme a los datos oficiales de Fomento, a pesar de que transcurren ya más de seis años desde que se iniciaron las actuaciones en el tramo Renfe-Guadalmedina, sigue pendiente de finalización el 40% de la infraestructura total.

La Junta pide aclaraciones al TSJA

La Junta ha pedido al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ciertas aclaraciones sobre las cantidades económicas que se incluyen en una reciente sentencia en la que se acuerda rebajar a 14 millones la suma que a de abonar el Ayuntamiento de Málaga por la construcción del Metro. Será en el momento de recibir estas precisiones cuando momento adoptará la decisión de recurrir o no el fallo emitido por el alto tribunal andaluz, según informaron fuentes próximas al organismo.