A excepción de la ya casi eterna obra del Metro de Málaga, cuya inversión se dispara por encima de los 670 millones (con previsión de que roce los 800 millones una vez finalizada), no hay un escenario físico en el que se proyecten más inversiones en el momento presente que el puerto de la capital de la Costa del Sol. Del orden de 240 millones son los que a día de hoy están en juego, ya sean procedentes de fondo catarí Al Bidda Group, que pretende la construcción de un hotel de casi 140 metros de alto junto al dique de Levante (unos 100 millones); para la ejecución de un centro comercial en Muelle Heredia (otros 50 millones estimados), o para el soterramiento del tren (otros 50 millones). A estos tres elementos de la ecuación hay que sumar el compromiso de Noatum de desarrollar inversiones por unos 17 millones, y el interés de Oil Distributions Terminals de ampliar sus actuales instalaciones, con unas actuaciones que podrían rondar entre los 10 y los 15 millones de euros.

Estos números económicos evidencian el potencial de este espacio logístico, si bien chocan con la compleja tramitación administrativa que, en algunos de los casos, se requiere antes de que se concreten los movimientos finales. En este contexto, el presidente de la Autoridad Portuaria, Paulino Plata, pero sobre todo dos cargos del PSOE, Francisco Conejo, en calidad de responsable regional de Política Institucional, y María del Carmen Moreno, nueva portavoz socialista en la Casona del Parque, tomaron ayer la palabra para incidir en la necesidad de que se allane en terreno para el avance cierto de estas intervenciones.

Fueron precisamente los responsables partidistas los que asumieron buena parte del protagonismo en la comparecencia de prensa celebrada junto a la sede principal de la Autoridad Portuaria. Y lo hicieron cuestionando de manera clara el papel que las instituciones gobernadas por el Partido Popular, ya sea en la esfera local, con el Ayuntamiento, ya sea en la esfera nacional, con el Ejecutivo de la Nación, deben jugar para no frenar el potencial de este recinto productivo.

"No llega el progreso ecónomico porque Málaga está frenada por el PP y el agotamiento de su proyecto", afirmó Moreno, quien anunció que va a reclamar al alcalde, Francisco de la Torre, que inicie los trámites necesarios para modificar el Plan Especial del Puerto con el fin de permitir la construcción de un centro comercial en Muelle Heredia, que vendría a suplir la idea original de un complejo de oficinas. Tal variación urbanística, cuya tramitación y aprobación compete al Ayuntamiento, ha de ser previamente solicitada por el Puerto, extremo que no ha tenido lugar hasta la fecha. A ello se suma que si bien existe una empresa que hace unos nueve meses mostró interés en desarrollar usos comerciales sobre una parcela de unos 26.000 metros, cualquier avance requiere previamente del acuerdo con la Agencia Tributaria y la Guardia Civil para trasladar las instalaciones que ambos organismos tienen en el espacio. En el caso del primer ente, además, la obligación del Puerto es garantizarle un nuevo edificio, lo que podría necesitar de unos 3 millones de inversión.

Sobre el particular, Plata admitió la posibilidad de que su ejecución pueda ser una "mejora" a plantear por las empresas que concurran en un procedimiento que aún se antoja lejano en el tiempo. Incluso, no es descartable que tenga que ser la propia Autoridad Portuaria la que deba asumir el coste de construcción para minimizar los obstáculos del proyecto.

Moreno incidió en que la inversión que supondría este centro comercial, con unos 50 millones, permitiría generar del orden de 600 empleos. "Permitirá potenciar intervenciones el soho, el Palmeral de las Sorpresas y Muelle Uno", expuso la portavoz, para la que el puerto "debe ser clave para la regeneración económica de la ciudad". En esta misma línea, Conejo abogó por hacer del recinto "un referente andaluz en el ámbito turístico, logístico y comercial" y reclamó al PP "que no frene estos proyectos porque el puerto esté gestionado por la Junta".

Asimismo, reclamó el impulso del soterramiento del tren del puerto, criticando que el PP guardase el proyecto que elaboró el PSOE cuando estuvo en el Gobierno, y aseguró que se tratará de una de las primeras acciones que se demandará al futuro Ejecutivo.

También destacó el valor de la conexión con Tánger, de la que aseguró hay varias navieras interesadas, dado que permitirá a la capital "abrir un nuevo mercado de clientes, el de la clase media marroquí, que tiene un alto poder adquisitivo y que busca destinos de compras". Conejo avaló la inversión planteada para el hotel de lujo en el dique de Levante, al entender que situará a Málaga "entre los destinos de lujo del Mediterráneo".