El indigente de origen extranjero cuyo cadáver apareció ayer atado a un banco en las inmediaciones del aeropuerto murió por aspiración de contenido gástrico, esto es, ahogado con su vómito, tras haber consumido elevadas cantidades de alcohol. Así lo ha revelado la autopsia que este sábado se le ha practicado al cuerpo, según ha podido saber este periódico.

El cadáver no presenta golpes ni lesiones, pero el hecho de que tuviera la ropa interior bajada llevó a los investigadores a pensar que había sufrido abusos sexuales. Aunque no hay signos evidentes, se han enviado muestras a un laboratorio para determinar si fue así.

La investigación continúa su curso dado que tuvo que ser otra persona la que lo inmovilizara en el banco. Fue la postura que mantenía la que le pudo provocar la muerte. Ahora habrá que estudiar la relación entre ambos hechos y la casualidad.