El 'tijeretazo' del Gobierno siembra de dudas las grandes obras en Málaga

El gran puzle de infraestructuras dibujado en los últimos años en la provincia de Málaga, cuya culminación estaba prevista para los próximos meses y años, se tambalea. El actual escenario de crisis económica y la determinación del Gobierno central de reducir de forma severa el déficit público van a obligar al Ministerio de Fomento a rebajar en 6.400 millones de euros (3.200 este año y el resto en 2011) la previsión de inversiones a nivel nacional, circunstancia que tendrá, sin duda, incidencia sobre el territorio malagueño, al que, sólo en 2010, los Presupuestos generales del Estado reservan una inversión de mil millones, de los que unos 750 corresponden a los organismos dependientes de Fomento.

La duda, que ayer no despejó el ministro del ramo, José Blanco, en su comparecencia en el Congreso de los Diputados, radica en señalar con precisión las obras públicas que se verán lastradas por el recorte. Aunque su mensaje minimiza buena parte de la incertidumbre. "Todas las actuaciones tanto en carreteras como en ferrocarriles sufrirán un retraso medio de al menos un año en los plazos de ejecución, con la salvedad de aquellas que se puedan licitar o complementar a través del plan extraordinario de colaboración público-privada", sentenció.

Es decir, que la huella se dejará sentir, especialmente, sobre las actuaciones viarias y ferroviarias, materias para las que la Administración central destinaba a Málaga casi 430 millones este año. De la rebaja, según Blanco, se salva Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena), que cifra su aportación en la provincia en 339 millones, de los que 124,6 se destinan a la segunda pista. Sobre este proyecto, fuentes del organismo indicaron que no se verá afectado y recordaron el avanzo estado de los trabajos.

Algunos confían en que infraestructuras que se encuentran ya en fase de terminación puedan salvar este obstáculo, caso de la hiperronda (146 millones en 2010), cuya apertura parcial estaba prevista para este verano e íntegra para finales de ejercicio (con un año de retraso) y el soterramiento de la travesía de San Pedro de Alcántara (22,1 millones), con un 80% de la obra ya finalizada.Entre los que esperan que estas intervenciones superen la criba está el secretario general del PSOE en Málaga, Miguel Ángel Heredia, quien ayer aludió a la situación favorable de la provincia, donde "las grandes obras que garantizan el futuro están avanzadas o casi finalizadas, caso del aeropuerto, las redes ferroviarias o las carreteras", al tiempo que recordó que en el tiempo de gobierno del PSOE se han destinado a Málaga unos 6.000 millones. Lo que no supo garantizar es que estas obras no vayan a sufrir retraso.

En este mismo escenario de interrogantes pueden incluirse otras acciones como la construcción del tercer carril de la ronda este, cuya terminación se apunta para mayo de 2011; los accesos sur y norte al aeropuerto (33 millones), también en ejecución; y la nueva línea ferroviaria de alta velocidad entre Antequera y Granada, para la que en el presupuesto de este ejercicio se reservaban 170 millones de euros.

Pero "con la que está cayendo", expresión que ayer el ministro empleó en varias ocasiones de su comparecencia, lo que parece más que improbable es ver avances significativos en algunos de los compromisos históricos de Fomento. Entre ellos, la llegada de la alta velocidad al aeropuerto de Málaga o el corredor ferroviario de la Costa del Sol, intervención sometida a negociación con la Junta de Andalucía desde hace meses (sin novedad aparente). Esta iniciativa, conforme a la nueva estrategia estatal, podría verse beneficiada del Plan Extraordinario de Infraestructuras de Fomento, que aboga, justamente, por la colaboración pública-privada.

O el Museo del Transporte en el Campamento Benítez, para el que la ex ministra del ramo Magdalena Álvarez anunció una inversión de 300 millones de euros. No obstante, Blanco ya aplazó sine die este proyecto alegando la existencia de un contencioso judicial por parte del Ayuntamiento de Málaga en relación con su propiedad. A ello hay que sumar el carril bus-VAO entre Málaga y Torremolinos, recientemente expuesto a información pública por parte del Ministerio de Fomento y cuya construcción se calculaba en unos cien millones de euros. Dado el estado de la infraestructura y conforme al argumento empleado por Blanco, esta obra se verá aplazada o descartada. Y en la misma situación se encuentra la previsión de llevar el AVE a Ronda, para el que este año se reservaban 85.000 euros, que deberá esperar aún a que la tempestad amaine.