Elisa García España, profesora de Derecho Penal de la Universidad de Málaga, explica que estrenó sus clases en primero de Criminología exponiendo una imagen tachada de la serie CSI. Quería dejar claro a sus alumnos que un criminólogo nunca será Grissom, porque los CSI de la televisión estadounidense en versión española son policías científicos. Reconoce que existe cierta confusión, no ya sólo en España sino en toda Europa, en torno a esta profesión emergente que comparte fronteras con la Psicología, el Derecho, la Sociología e incluso la Medicina legal.

La (UMA) ha incorporado esta titulación en el curso que acaba de arrancar y sólo en la primera fase de inscripción apareció ya en el podio de las carreras más demandadas, junto a Medicina, Fisioterapia y Enfermería. Se recibieron más de 300 solicitudes para ocupar algunas de las 75 plazas previstas para el primer curso. Este desequilibrio ha implicado que la nota de acceso inicial quedara por encima del 10. Es decir, 75 de los estudiantes más brillantes de la UMA quieren ser criminólogos. Pero, realmente, ¿qué es la Criminología y a qué se dedica un criminólogo? "La Criminología se ocupa de la prevención de la delincuencia, de la rehabilitación del delincuente, de la asistencia a la víctima y de analizar el control social que existe en torno al delito", aclara Elisa García España. "Es una ciencia que se encarga de estudiar el delito de cara a su prevención. Analiza los conflictos y trata de buscar soluciones, medidas preventivas científicas actuando sobre la víctima, el delincuente y el control social que ejercen tanto el sistema judicial y policial como los propios ciudadanos a través de su sentimiento de seguridad o inseguridad".

La profesión, según la profesora García España, es equiparable a la Psicología hace 20 años. "Entonces nadie pensaba cuál iba a ser el campo profesional de un psicólogo. Hoy día aún no se ve el sitio laboral de la Criminología pero en unos años existirá no sólo en el ámbito policial, judicial o penitenciario, sino que también se demandarán criminólogos en los ayuntamientos, colegios u oficinas de asistencia a las víctimas. Las primeras promociones serán esenciales para determinar el futuro".

Por el momento, los alumnos de Elisa García España lo que quieren es ser policías. "Al comenzar el curso se les preguntó y el 70% respondieron que pretenden opositar para entrar en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado una vez que se gradúen". Este colectivo es muy homogéneo, sin embargo, la heterogeneidad reina en el 30% restante, donde hay alumnos mayores de 40 años, policías locales, enfermeros y hasta un ama de casa.

La nueva titulación se nutre de la experiencia del Instituto Interuniversitario de Criminología que a comienzos de los 90 puso en marcha un título propio de experto en Criminología. En 2003 se creó en España la Licenciatura de segundo grado en Criminología, a la que podían acceder los estudiantes con una Diplomatura o tres años de Licenciatura.

Aquellas circunstancias obligaron a los responsables de la sección malagueña del Instituto de Criminología, que dirige el catedrático de Derecho Penal José Luis Díez Ripollés, a recomponer su título que pasó a denominarse experto en Criminología y Seguridad Pública. Durante lustros estas aulas han atraído a licenciados y diplomados fundamentalmente de la Policía y la Guardia Civil y en menor medida a funcionarios del sistema penitenciario y judicial y ocasionalmente a trabajadores de la seguridad privada que contaran con el examen de acceso a la Universidad y superaran una prueba de ingreso específica. En la actualidad el instituto ofrece los cursos de experto en Criminalidad y Seguridad Pública, en Detective Privado y en Psicología Forense.